Salta: hubo cuatro tentativas de femicidio en lo que va del año

Además, hubo tres femicidios. Claudia Roxana Padilla, asesinada el 9 de febrero había denunciado en mayo a su pareja por no respetar la prohibición de acercamiento impuesta.

11 Feb 2020
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IMAGEN LA GACETA

En 2019, según el Observatorio de Violencia contra la Mujer, hubo 17 femicidios en la Provincia aunque desde el Ministerio Público aseguran que solo hubo 10 las causas caratuladas así. Así, los femicidios en Salta en 2019 aumentaron un 55% con respecto a 2018. Los meses con mayores casos fueron diciembre y noviembre en donde hubo cinco y tres muertes de mujeres, respectivamente.

Muchos de estos asesinatos, tuvieron una instancia previa de denuncia por parte de la mujer afectada: hubo ataques que derivaron en pedidos a la Justicia de restricción de acercamiento. La tentativa de femicidio existe en el Código Penal y ocurre cuando un hombre lleva a cabo actos encaminados a quitarle la vida a una mujer, pero no lo porque la víctima sobrevive al ataque.

“La tentativa de femicidio nos permite analizar también dimensión del problema. La tentativa es un delito y, a la vez, es un intento de femicidio que afortunadamente no sucedió”, explica Inés Bocanera del Observatorio de Violencia Contra La Mujer.

“En estos casos hay que tener en cuenta dos cuestiones: a la mujer que sufrió esta tentativa de femicidio y, si tiene hijos, pensar que ellos también se ven afectados por la situación”, explica Bocanera y agrega: “la Justicia debe hacer una medición de riesgo acertada que permita que la mujer recupere confianza y el hecho tenga menor impacto en su vida y en su salud. Atravesar una situación así es muy traumático y el Estado debe garantizarle asistencia a ella y a sus hijos”.

El Estado, según el Observatorio, debe realizar una evaluación pormenorizada de riesgo de la persona y restituir su situación a un mejor estado que el anterior. “Tiene que tomar las medidas para que el agresor quede detenido y la victima recupere su seguridad”, insiste la especialista en género.

El caso de Claudia Roxana Padilla, asesinada el 9 de febrero pasado por su expareja en Salta da cuenta de esto. Luego de estar cuatro años separada del padre de sus cinco hijos, y haberlo denunciado por incumplir una restricción domiciliaria, el hombre se las ingenió para ingresar a la vivienda y asesinarla, asfixiándola. Sus hijas fueron a despertarla y dieron aviso a la policía cuando no reaccionaba.

En Salta se dieron a conocer cuatro casos de tentativas de homicidios. El 1, 6, 16 y 17 de enero. Todos fueron realizados por las parejas de las mujeres que denunciaron estos hechos en Rosario de Lerma, Capital, Orán y General Güemes.

Antecedentes

En 2012, por primera vez un fallo condenó a un hombre, Javier Weber de 53 años a 21 años de prisión por intentar matar a su ex mujer, Corina Fernández. Ese fue el primer caso en la historia judicial argentina que nombra ese delito como "tentativa de femicidio". Los jueces hablaron de que "el femicidio es, en sí mismo, la expresión extrema de la violencia de género por cuanto implica la negación de la vida misma”, y la sentencia hizo una clasificación del hecho como "violencia de género" y descartó de lleno una categoría que se dejó de brindar en estos casos: la de "emoción violenta", como pedía la defensa, y que se aplicó en la condena del femicida de Wanda Taddei, el ex baterista de Callejeros, Eduardo Vásquez, que así recibió 18 años de cárcel en lugar de prisión perpetua por el homicidio agravado por el vínculo de su esposa, según indica Clarín.

Corina Fernández vivía amenazada y llegó a denunciar a su expareja 80 veces, pero las respuestas de la Justicia no la protegieron. El hombre nunca cumplió la restricción de acercamiento y la baleó el 2 de agosto de 2010, a las 8 de la mañana, disfrazado, en la puerta del colegio de las dos hijas de ambos, que hoy tienen 11 y 12 años. Corina se salvó de milagro aunque cargó con las balas en su cuerpo durante mucho tiempo.

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Femicidios 2020

El año en curso trae hasta el momento tres casos muy resonantes que se encuentran en su etapa de investigación.

Analía Astorga

Fue el primer femicidio del año y tuvo repercusión nacional. Analía fue arrojada de una camioneta Toyota Hilux por su pareja luego de recibir dos disparos. Su pareja luego chocó contra un camión y falleció en una ruta de Joaquín V. Gonzales. Había sido atacada a golpes en el rostro y tenía dos balazos, uno en la cabeza y uno en el tórax, según lo determinó la autopsia. Analía Anabel Astorga tenía 27 y su pareja, Jorge Marcelo Amaya, 32. No convivían ni tenían hijos y mantenían una relación sentimental desde hacía seis meses.

Algunos vecinos observaron cuando la Analía cayó en la vía pública y, al ver que la camioneta se retiraba del lugar, alertaron a la policía.

La Policía confirmó luego que la camioneta Toyota chocó de frente con un camión, tras lo que se prendió fuego, por lo que Amaya murió calcinado.

Paola del Milagro Ávila

El 17 de enero pasado, cerca del mediodía, la Policía informaba el hallazgo del cuerpo de una mujer en el barrio Puerto Argentino, a metros del Centro Cívico Grand Bourg. Paola había sido desfigurada, a los golpes. Si bien todavía la Justicia continúa rearmando sus últimas horas en el barrio, se supo que acudió a una reunión en donde había personas que no conocía, y que habría muerto en un descampado por los reiterados golpes en su cráneo.

Paola y Campos compartieron, junto a un grupo nutrido de amigos, tragos y pasta base. Se fueron moviendo por distintas partes del barrio. En un momento de la noche, la policía los interceptó: quizá llamó alguien molesto por el ruido, tal vez sólo los vieron. Los jóvenes se dispersaron y dejaron las botellas, pero al rato volvieron a juntarse. El último lugar fue el descampado, donde hallaron el cuerpo de Paola.

Según la fiscal a cargo, no se descarta la intervención de algún otra persona pero tampoco piensan en una múltiple autoría.

Claudia Roxana Padilla

Fue asesinada el 9 de febrero. Tenía 37 años y fue muerta en manos de su expareja en Salta Capital. Sus hijas fueron a despertarla y dieron aviso a la policía cuando no reaccionaba.

El único imputado por este caso es Ricardo Ruiz, de 43 años. El hombre no prestó declaración y pudo verificarse que registraba una condena del año 2015 por hechos de violencia y había sido denunciado en 2019 por no cumplir con las restricciones de acercamiento impuestas.

La pareja había estado junta por 18 años y tuvieron 5 hijos. Si bien se encontraban separados desde hace ya más de 4 años. Había antecedentes de violencia de Ruiz hacia su pareja, por lo que fue condenado en 2015 y se le impusieron medidas de restricción. En mayo de 2019 fue denunciado nuevamente por la mujer por no respetar la prohibición de acercamiento impuesta e ingresar a la vivienda familiar en estado de ebriedad para insultarla, lo cual tramitaba en el Juzgado de Violencia Familiar y de Género 1 del Distrito Centro.

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