Mujer denuncia que la policía de Salta torturó a su hijo

Se suma una grave denuncia contra la policía de Salta. Una mujer dijo que la policía picaneó a su hijo de 25 años, en Barrio Solidaridad.

María Alejandra dijo a Página/12 que la detención se produjo el 20 de junio.

Ese día, su hijo de 25 años, al ver que se acercaba un patrullero, se metió corriendo en la casa, pero los policías ingresaron sin orden y se lo llevaron. María Alejandra intentó frenar la detención y también fue presa. Durante la detención pudo ver cómo torturaban a Cristian.

La mujer contó que el 20 de junio, alrededor de las 14, su hijo volvía a casa, después de tomar con unos amigos. Que consumiera bebidas alcohólicas molestó al padre del joven, que al ver pasar a efectivos de la policía, los llamó para asustar al joven. El hombre nunca podría haber imaginado lo que los policías harían.

"Mi hijo le tiene terror a la Policía, cuando los vio se metió adentro de la casa rápido. Los policías entraron a la casa sin autorización, lo agarraron, le pusieron esposas y lo sacaron. Me decían a mí que lo tenía que denunciar. Yo les preguntaba ¿por qué si no hizo nada? Nunca dijimos que lo detengan. Mi marido planteó después que los llamó  'solamente para asustar a Cristian'", relató la madre.

Según denunció la mujer, los policías tiraron a su hijo en el móvil y comenzaron a golpearlo. "Vi como los policías se subieron encima de él. Uno le apretaba con la rodilla el cuello y el otro el estómago. Casi me lo matan en el patrullero. Pedíamos que lo suelten. Yo me subí al móvil, me decían que me baje pero no lo hice", manifestó.

En la comisaría 15 de Barrio Democracia, a la mujer un policía le torció el brazo.

Vio que a su hijo le pusieron un "tacho en la cabeza" mientras lo golpeaban. "Yo veía que a mi hijo le faltaba el aire y se le levantaban los pies", detalló la madre.

Sostuvo que no paraban de golpearlo. “Vi como un policía le metía un palo en la cola a mi hijo por encima del pantalón. Entonces les grité que los iba a denunciar. Se reían y me decían que sería al revés, que ellos nos iban a denunciar", dijo.

Los policías denunciaron al joven por resistencia a la autoridad y lesiones agravadas. María Alejandra sostuvo que el hijo "en ningún momento pudo levantarles la mano".

El médico legal, al revisar al joven, ordenó a los policías que lleven al joven al Hospital San Bernardo porque estaba muy lesionado. Allí, la madre aseguró que uno de los efectivos amenazó al chico para que diga que no le dolía nada.

Al recibir el alta en el hospital, el joven fue llevado a la Alcaidía. Allí, la madre pudo hablar con el joven. "Cuando pude verlo después en la Alcaidía, mi hijo me contó cosas terribles. En la Comisaría de Democracia los policías lo picanearon y le decían 'llamala a tu mamita p...'. Me dijo que a la madrugada lo querían hacer pelear con otro preso y él se negó. Tiene costras en las muñecas, al hablar de los golpes me decía que sentía que 'le arrancaban la piel a patadas con los botines'", expresó la madre.