Diputados Nacionales denuncian el desalojo de niños wichis desnutridos, de un hospital salteño

A fines de marzo, el hospital Juan Domingo Perón, de la ciudad de Tartagal, convirtió el espacio destinado a Recuperación Nutricional en sala para pacientes con Coronavirus.

La dirigente wichi Octorina Zamora denunció, en ese momento, que siete chicos de la comunidad wichi habían sido desalojados, pese a que se encontraban con serios problemas de desnutrición.

“los niños desalojados actualmente están encerrados junto con sus padres y madres acompañantes en boxes de uno de los salones de pediatría del hospital atravesando una situación de mucha angustia y padeciendo múltiples incomodidades, como por ejemplo contar con un solo baño para todos. Se encuentran habitando el lugar sin aislamiento individual con casos de tuberculosis, cuando se trata nada más ni nada menos que de personas en estado de Recuperación Nutricional”, dijo Octorina. Asimismo, agregó: “...toman está determinación con los pacientes Indígenas que se salvaron de morir de hambre como si se tratara de animales cuando lo cambian de corral” y “se aprovechan de la situación dolorosa de la pandemia para continuar su marcha exterminadora de quitarle derechos a los niños más vulnerables del país”. Por último, mencionó “Esto no debemos permitirlo y por eso solicitamos al Gobernador revisar la situación”, acotó.

Esta semana en el Congreso de la Nación se aprobó un pedido de informe, dirigido al Ministerio de Salud de la Nación, sobre lo sucedido en Salta.

Una de las personas que impulsó el proyecto fue la Diputada Nacional Lía Verónica Caliva.

Octorina señaló, además, que “cuando empiece el calor en la zona y se le sumen las consecuencias sociales de la pandemia, habrá más damnificados por el hambre y es cuando más que nunca se necesitará ese centro”.

Qué dicen las autoridades del nosocomio

El gerente del hospital Juan Domingo Perón, Juan López, dijo a LA GACETA, el 1 de Abril, que hubo una reubicación de los pacientes, en la procura de separar los sectores para cuidar a los pequeños en recuperación de posibles contagios ante eventuales casos de COVID-19 y en el marco del protocolo dispuesto por Salud.

López explicó que con anterioridad a esta disposición, el sector de guardia de pediatría y de adultos se encontraba todo junto.

Sostuvo, además, que la decisión fue tomada inclusive en consenso con los padres de los chicos, y caciques de algunas comunidades.

“Tenemos que prever la situación ante posibles contingencias, lo que sucedió fue que reorganizamos la guardia, pero no echamos a nadie, lo hicimos para cuidar a los 7 chicos que están en plena recuperación nutricional”.