La iglesia salteña no hablará del caso Rosa "por orden del Vaticano"

Todo es hermetismo. El silencio reina en los pasillos de la Curia. Por directivas desde el Vaticano, las máximas autoridades de la Iglesia salteña no están autorizadas para hablar del caso Agustín Rosa, el sacerdote denunciado por presuntos abusos sexual en perjuicio de ex miembros del Instituto Hermanos Discípulos de Jesús San Juan Bautista.

Según pudo conocer LA GACETA, hoy monseñor Mario Antonio Cargnello dialogará con su par de Quilmes, Luis Stöckler quien fue designado por el Papa Francisco como el Comisario Apostólico para llevar adelante la investigación canónica, que inició el 15 de octubre de 2015 en la Parroquia de la calle Santa Fe al 1200. 

Las máximas autoridades mantienen reuniones y audiencias sin recibir a la prensa. Por estas fechas, Cargnello acostumbra grabar el saludo navideño para el pueblo católico. Pero el caso Rosa golpeó fuerte, puertas adentro. Es por esto que Monseñor no recibirá a los medios de comunicación, para evitar ser consultado sobre el caso. El saludo será grabado y luego difundido a la comunidad. 

Hace 14 meses inició la investigación canónica. En un primer momento trascendió que Agustín Rosa era investigado por presuntos delitos económicos. Desde entonces la Parroquia de Villa Soledad está intervenida; el sacerdote fue apartado y no está autorizado a celebrar ceremonias religiosas. 

En los últimos días se conocieron denuncias en contra del sacerdote, lo que derivó en el inicio de una investigación penal. El caso está a cargo de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, a cargo de la fiscal penal María Luján Sodero. 

Las denuncias son “consistentes en tocamientos, como así también violencia verbal y psicológica a partir de sucesos en los que eran humillados, ya sea por su condición dentro de la comunidad”, expresaron desde el Ministerio Público Fiscal.