Cómo se lo vio a Reynoso y todo lo que pasó en la primera audiencia

El inicio de la causa contra el ex juez Federal de Orán, Raúl Reynoso, y otros siete imputados generó mucha expectativa, no solo en los medios y el público interesado sino en toda la Justicia Federal. Ver al ex magistrado en el banquillo de los acusados generó morbo, pero él se mostró tranquilo, sereno y muy activo.

Llegó a Tribunales antes que nadie e ingresó por atrás para que los periodistas no adviertan su arribo. Fue trasladado por el Servicio Penitenciario Federal, ya que Reynoso está detenido allí desde hace más de un año.

A las 10.24, una hora después de lo previsto, comenzó primera audiencia en el que Reynoso, los abogados René Gómez, Arsenio Gaona, Ramón Valor, María Elena Esper, los empleados judiciales Miguel Saavedra y César Aparicio y su hermana Rosalía Aparicio están acusados de integrar una asociación ilícita que beneficiaba a detenidos por narcotráfico a cambio de dinero.

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Todos los imputados estuvieron presentes acompañados de sus abogados. Reynoso se sentó a la izquierda del Tribunal, entre su abogado Federico Magno y el defensor oficial Oscar Del Campo. Su rostro fue el de un hombre tranquilo, sereno. Incluso cuando le tocó participar se lo vio bien de salud, pese a que hace tiempo viene solicitando el arresto domiciliario por padecer de diabetes e hipertensión.

Apenas los jueces Federico Díaz, Gabriel Eduardo Casas, Carlos Enrique Jiménez Montilla y Mariana Catalano dieron por abierto el juicio, Reynoso solicitó que se lo tenga como su propio codefensor, para trabajar junto con Magno.

El pedido no fue la única participación del acusado de liderar la asociación ilícita, sino que se volvió a mostrar activo cuando acompañó el pedido de su abogado de recusar a Catalano. Ante la respuesta de los fiscales de que ya no podían hacerlo, Reynoso tomó la palabra y argumentó que sí lo era, ya que recién se anoticiaban de la presencia de la jueza.

En la sala estuvieron los familiares del ex juez federal. Su esposa y sus tres hijas mujeres se sentaron entre el público y escucharon atentamente las alternativas de la audiencia. Solo faltó el hijo menor. En un cuarto intermedio, las tres hijas fueron autorizadas para acercarse a su papá y se fundieron en un abrazo.

Minutos después, Reynoso se levantó y, acompañado por su custodia, fue escoltado hasta el baño, usando un chaleco del Servicio Penitenciario pero sin esposas.

Entre los imputados Valor, Gaona, Gómez y Esper reinó el buen humor. En los cuartos intermedios se quedaron en la sala conversando y, en más de una oportunidad, riéndose. El mismo clima se vivió entre los abogados defensores por un lado y los fiscales y auxiliares por el otro. Vivieron la primera audiencia de un juicio paradigmático y de repercusión nacional como si fuese uno más.

Especulaciones de pasillo

Entre la demora en el inicio, los dos cuartos intermedios que se realizaron y el cierre de la jornada, muchas especulaciones se tejieron de lo que podía llegar a pasar.

Los abogados defensores, quienes alegaron haberse enterado hoy mismo de la designación de Catalano, planearon en el primer parate la recusación de la jueza, lo que concretaron apenas reiniciado el juicio.

Simultáneamente, fuentes fiscales daban a entender que no se iban a quedar atrás y también estaban por hacer una presentación fuerte. Luego de resuelto el apartamiento de Catalano, el Tribunal cerró la audiencia y el intento de pronunciamiento del fiscal Carlos Amad quedó trunco y deberá esperar hasta el próximo lunes cuando se reanude el juicio a partir de las 8.

Además de la eventual presentación de los fiscales, cuando se abra la etapa de cuestiones preliminares, la defensa de Valor hará un planteo de nulidad cuestionando que en la instrucción no se notificó a las partes cuando declararon los testigos de cargo que declararon en contra de los abogados imputados, adelantó a LA GACETA, Ramón Saldaño.

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En caso de que los incidentes presentados no demoren el transcurso del juicio, superada la instancia de presentaciones preliminares correspondería que inicien las declaraciones comenzando, ni más ni menos, que por Reynoso. Antes del juicio, su abogado había adelantado que su defendido iba a optar por declarar. Se espera que su declaración se extensa por lo que, al menos una audiencia entera, esté destinado solo a ello.

Con audiencias previstas solo los lunes por la mañana por cuestiones de agenda de los jueces, otro tema recurrente de conversación en los pasillos fue el de cuánto podría extenderse el juicio. Cuando se retiraba de Tribunales, René Gómez consideró que “como mínimo se estirará hasta marzo del año que viene”. Entre los más de 160 testigos, pruebas que debe producirse como la inspección ocular y la feria judicial de enero, el juicio tendrá “la misma complejidad y extensión que uno de Lesa Humanidad”, consideró el fiscal Carlos Amad.

Pasadas las 13 el Tribunal resolvió levantar la audiencia hasta el lunes 11 de septiembre. Reynoso se retiró custodiado de vuelta hacia la Cárcel Federal de Güemes mientras que el resto de los imputados, todos libres, abandonaron el lugar rápidamente y sin hablar con los medios.