Vinculan al “Patrón del mal” con el hallazgo del cadáver incinerado en Orán
El único detenido trabajaría para el supuesto cabecilla de la banda que traficaba drogas y personas en la frontera.
Aún los investigadores no logran determinar la identidad del cadáver calcinado, encontrado hace menos de una semana en Orán, pero un hombre ya fue detenido y tendría vínculos con el “Patrón del mal del Norte”, el supuesto cabecilla de una banda que traficaba drogas y personas, y había construido un imperio en el norte.
Las pistas condujeron a la Policía hacia Juan Carlos Tejerina Ortega, detenido luego de un allanamiento que realizó la fuerza durante el fin de semana. Según la información oficial, en el operativo se secuestraron elementos de interés para la causa y el hombre fue imputado por el delito de homicidio criminis causa y se negó a declarar.
¿Quién es Tejerina Ortega? Se trata de un hombre de 35 años, de nacionalidad boliviana, que se desempeñaría como el sereno de la playa de estacionamiento donde fue hallado el cadáver. Pero, además, sería empleado de Juan Antonio Aguilera, señalado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, como “El Patrón del mal del Norte”, tras su detención a fines de mayo, luego de dos años de investigación.
Según Radio Güemes, algunos testigos aseguraron que el día del hallazgo del cadáver a Tejerina se le vio un tanto nervioso, molesto. Al momento es el único detenido en la causa.
Fuentes vinculadas a la investigación aseguraron a LA GACETA que la escena donde apareció el cuerpo, el 30 de mayo pasado, parece haber sido preparada. El baldío cercano al puesto de control 28 de Gendarmería Nacional. El terreno baldío estaba cubierto por pastizales de entre un metro y medio y dos metros de alto, pero donde fue hallado el cuerpo el lugar parecía haber sido cortado y limpiado. Alrededor del cadáver encontraron cajones de madera, que usualmente son usados para transportar frutas y verduras.
Un aspecto que es de sumo interés para la causa es que especialistas en pericias indicaron que cuando una persona es quemada viva el cuerpo tiende a quedar en posición fetal debido al dolor que siente la víctima. Sin embargo, se cree que esta persona fue ultimada antes de ser incinerada ya que el cuerpo no estaba encogido.