Qatar promete un torneo como ningún otro
Alemania cumplió; Sudáfrica superó las expectativas, Brasil capeó la tormenta y salió a flote, mientras que Rusia cambió la visión negativa del resto del planeta cuando le tocó organizar la Copa del Mundo. ¿Qué pasará en Qatar dentro de cuatro años? Solamente hay una certeza: el próximo Mundial será un torneo como ningún otro.
El pequeño reino del golfo, que se extiende solo 180 kilómetros de un extremo a otro, es diferente a cualquier anfitrión anterior con poca tradición deportiva y una población de poco más de 2,5 millones de personas. Nunca ha jugado un Mundial y el clima es tan duro entre junio y julio que la histórica fecha del torneo tuvo que ser modificada.
Pero lo que Qatar tiene es una riqueza fabulosa, suficiente para persuadir a la FIFA de que es capaz de ser sede del torneo tras un proceso de selección empañado por denuncias de soborno.
El primer país árabe que organizará el torneo está planeando ocho estadios nuevos. Uno ya está listo, dos se entregarán este año y el resto en 2021. Ninguno está a más de 35 kilómetros del centro de la capital, Doha, y a todos se podrá acceder a través de un nuevo sistema de metro. El ritmo de construcción ha llevado a denuncias de explotación de trabajadores migrantes, y organizaciones de derechos humanos condenan las prácticas laborales del país.
“Estamos listos basándonos en el cronograma que hemos establecido”, señaló en Moscú Hassan Al Thawadi, del comité organizador de Qatar 2022.
La FIFA confirmó que el torneo se realizará del 21 de noviembre al 18 de diciembre de 2022, pero queda por decidir si habrá 32 equipos o se ampliará a 48. “Será una decisión que se tomará de común acuerdo entre la FIFA y Qatar”, agregó Al Thawadi.
Cambiar el calendario del torneo interrumpirá las temporadas de liga y ha encaminado a la FIFA a un choque inevitable con los grandes clubes europeos, pero los qataríes buscan darle un tono positivo al cambio. “Los jugadores estarán a mitad de temporada, no al final, por lo que podrán mostrar un mejor rendimiento”, sostuvo Al Thawadi.
Qatar también relajará las leyes sobre consumo de alcohol, planificando áreas para los hinchas extranjeros en las que se pueda beber para garantizar que reproduzca la atmósfera festiva. “La Copa del Mundo representa una maravillosa oportunidad para cambiar las opiniones y vencer los estereotipos. Seremos una nación acogedora”, agregó.