Poca mística y nuevas tendencias: ¿Cómo fue el lanzamiento presidencial de Urtubey?
En siete minutos y desde un particular escenario, el gobernador de Salta convocó a sus seguidores a difundir su mensaje: “Construir una Argentina de argentinos”.
El lanzamiento oficial de Juan Manuel Urtubey a la carrera presidencial se realizó en un acto que tuvo de todo, pero poca mística peronista. En el Centro de Convenciones de Limache, el lugar elegido para este evento, no se observaron colectivos con militantes, choripanes, bombos y demás artículos clásicos de la historia del movimiento nacional.
Acompañado de su esposa, Isabel Macedo, Urtubey ingresó al salón a las 19 y la multitud, ubicada prolijamente en sillas, lo aplaudió. Luego de eso, el presentador del acto dio la palabra a cinco personas. Leila Garzón (estudiante de Ciencias de la Educación en la Universidad Nacional de Salta), Sergio Chibán (expresidente de la Liga Salteña de Fútbol), Eduardo Kira (Presidente de la Cámara Hotelera y Gastronómica de Salta), Carolina Márquez (emprendedora) y el deportista Kevín Benavides hablaron sobre la imagen del mandatario y destacaron el impulso que otorgó a distintos sectores durante sus 12 años de gestión.
Después de eso, llegó su turno. Con zapatillas, jeans y remera oscura Urtubey subió al escenario 360° e hipnotizó a sus seguidores durante siete minutos. En ese tiempo, el precandidato a presidente los convocó a construir una “Argentina de argentinos” y remarcó la necesidad de “salir de la grieta” para superar la crisis actual.
Cuando llegó a la gobernación de Salta en 2007, Urtubey aseguraba que “nada ni nadie podría detener este cambio”. Después de doce años volvió a utilizar la misma frase y dijo que esto solo se detendrá cuando un salteño llegue al sillón de Rivadavia.
El Gobernador agradeció y a la lluvia de aplausos se sumaron cientos de banderitas argentinas que los invitados agitaron con sus manos.
Al ritmo de ‘Ji Ji Ji’, una emblemática canción de Patricio Rey y sus redonditos de ricota, Urtubey se retiró del lugar esperando que el destino brinde a su suerte.