Parroquia Santa Lucía: ¿qué dicen los vecinos sobre el padre Aguilera y las denuncias de abuso en su contra?

Ubicada en la zona oeste de la ciudad, sobre la calle 9 del barrio Santa Lucía, se encuentra la Parroquia que lleva el mismo nombre del lugar. En un barrio de clase media y en la zona central está, hace aproximadamente 18 años, a cargo del Presbítero Juan Carlos José Aguilera.

Se trata de una iglesia humilde caracterizada por una gran punta que sobresale por encima de las casas. Allí asisten decenas de niños y jóvenes para participar de las distintas actividades como catequesis y grupos juveniles.  

Con tres Vicarías a cargo, la iglesia central venera a Santa Lucía, una mártir cristiana que padeció el martirio durante la persecución de Diocesano: patrona de los pobres, ciegos y los niños enfermos.

Hace un poco más de una semana, el Arzobispado de Salta confirmaba la existencia de denuncias que acusaban al sacerdote, que creció junto a la comunidad, de presuntos abusos sexuales ocurridos años atrás.  

José Carlos Aguilera ejerce el sacerdocio desde hace más de 30 años.

A raíz de la noticia, la comunidad salteña apuntó directamente en contra de la iglesia católica y otros cuestionaron la veracidad de las denuncias.

Los lugareños, por su parte, se mostraron sorprendidos con la situación. Aunque algunos no estaban enterados; los que sí, acatan la decisión del Arzobispado: es inocente hasta que se demuestre lo contrario.

Quienes compartieron y convivieron parte de su vida con Aguilera lo definen como una persona íntegra, seria, y un excelente padre. “De no creer”, fue la frase más repetida a LA GACETA al momento de responder lo que sintieron al enterarse de la noticia.

Una vecina del barrio,   quien asiste a la iglesia hace más de 17 años, contó como la vio crecer con el sacerdote al mando: “Consigue donaciones de mercadería, vende ropa a bajo precio, trabajó para que se haga toda la edificación que se ha hecho al costado de la iglesia, cambió el altar. Hizo muchas obras, hizo cosas por otras iglesias”, dijo.

Según la gente del lugar, Aguilera se preocupaba y ocupaba de la comunidad y de otras comunidades, por lo que aprecian su desempeño dentro de la iglesia.

Aguilera ejerce el sacerdocio hace más de 30 años y es reconocido no solo por su amplia carrera, sino también por ser capellán de la Universidad Católica de Salta, donde da clases de teología.

Los vecinos lo estiman por su particular forma de dar su sermón los domingos, aunque para muchos este no sea el mejor. ”Yo lo veo correcto, hay gente que no le gusta porque cuando hace el sermón les dice de frente, esto es así o así”, reconoció un vecino. “Hay que escuchar la manera en que el habla, como él te explica las cosas. A veces hay gente que se molesta, porque le molesta que les digan las cosas. Pero las cosas que dice tienen razón”, agregó otra.

Gente cercana a la organización del templo contó que si bien Aguilera continúa ejerciendo su servicio, no lo hace de forma constante como antes. El sacerdote suele acompañar a la comunidad los domingos por la mañana, pero no siempre. 

Sin embargo, no todo es color de rosa y lo cierto es que hay una investigación canónica en curso y está en su etapa inicial. Hasta el momento y según pudo conocer LA GACETA, la causa no ingresó a la Justicia Penal. 

Mientras tanto, los vecinos de la zona mantienen la esperanza de que éste no sea un caso más, dentro de la Iglesia.