Marcovich, el hombre encontrado en Salta estaba endeudado por tener dos amantes
El condenado por la muerte del linyera Juan Carlos Carrizo debe ser indagado por el juez Pedro Roldán Vázquez.
TUCUMÁN.- Carlos Marcovich fue trasladado ayer a las 20 al penal de Villa Urquiza. El condenado había escapado en 2017 y se había mantenido prófugo hasta hace seis días, cuando fue capturado por la Policía salteña, en una zona cercana al estadio Padre Ernesto Martearena.
Con esto termina la fuga del hombre que en el año 2000, ahogado por las deudas, fingió su muerte para que su esposa cobrara un seguro. Para ello mató y quemó al linyera Juan Carlos Carrizo. El crimen ocurrió el 26 de abril de 2000. A los dos días se presentó a declarar ante la Justicia diciendo que lo habían asaltado y que los delincuentes lo habían liberado en San Pablo. Explicó que anduvo esos dos días vagando por distintos parques y que no había aparecido antes “por miedo”. Pero rápidamente el ex fiscal Héctor Abraham Musi descubrió incongruencias en su historia: “por lo menos contamos 18 contradicciones en sus distintos relatos”, dijo el funcionario.
Amantes y deudas
Marcovich llevaba una doble vida. Con su esposa Rosa Cortez tuvo cuatro hijos, pero paralelamente mantuvo 14 años de relación con Mary Sánchez.
REGRESO. Los móviles salen raudos hacia San Miguel de Tucumán, para despistar a los hombres de prensa.
Con Sánchez estuvo hasta que se cruzó en su vida con Viviana Abraham, a quien conoció en uno de sus trabajos. Abraham era propietaria del auto Renault 9 que se encontró junto al cuerpo calcinado de Carrizo, por lo que fue detenida e investigada por la Justicia hasta que se demostró que no había pruebas suficientes en su contra.
Además, para entonces Marcovich tenía a una tercera amante secreta en simultáneo. Se cree que este factor fue una de las razones más importantes por las que el hombre vivía endeudado.
A PRISIÓN. El condenado es ingresado a la cárcel de Villa Urquiza. imagen captura de video
Marcovich trabajaba como chofer de ambulancias para un centro de salud privado y para el Siprosa. En la institución pública, ascendió hasta conseguir un cargo administrativo, pero se corría el rumor de que pronto sería despedido, ya que era investigado por una gestión fraudulenta vinculada al pago de sueldos de sus compañeros.
EX BRIGADA. Marcovich es bajado para que se le hagan estudios médicos
En 2004 fue sometido a juicio. estaba en libertad por haber cumplico más de dos años de prisión preventiva. Cuando se iba a dictar el fallo (que fue condena a prisión perpetua) se escapó.
Jornalero en Neuquén
Tras la fuga, se estableció en Neuquén, donde trabajó para dos empresas abocadas al campo, hasta que un informe de Anses alertó a los pesquisas de su paradero. Se lo capturó en la localidad de El Chañar, de aquella provincia.
En 2009 fue llevado ante los jueces y escuchó la condena. Se le dijo que no gozaría de salidas transitorias hasta que cumpliera 17 años cautivo.
CONDENA. En 2004 fue sentenciado y en 2009 escuchó el fallo.
En determinado momento la Justicia le otorgó la prisión domiciliaria, según se explicó, por padecer una enfermedad terminal. Marcovich se mudó con una nueva pareja a una casa en la Banda del Río Salí.
Segunda fuga
En mayo de 2017, la mujer con quien Marcovich vivía lo denunció por abusar de su nieta. La niña se lo había contado, y más tarde los médicos confirmaron que efectivamente la menor había sido víctima de un ataque sexual. Cuando la Policía acudió al domicilio, los vecinos les informaron que el condenado se había fugado.
Estuvo prófugo hasta el 23 de enero de este año, cuando un vecino del barrio Norte Grande de la provincia de Salta lo reconoció al ver sus fotos en un informe que LA GACETA había publicado el 29 y 30 de diciembre de 2019. La persona realizó la denuncia en forma anónima.
Los investigadores de aquella provincia lo interceptaron cuando bajaba de una línea de ómnibus y se dirigía a trabajar.
Según trascendió, en Salta, Marcovich trabajaba en la carnicería de una nueva pareja y se lo conocía con el nombre de Carlos “Marcona”.
Detención en Salta
Seis días duró el trámite burocrático que autorizaba el regreso del detenido a Tucumán. Ese tiempo estuvo preso en la comisaría salteña de Santa Cecilia.
Finalmente, ayer a las 19, la Policía de Salta trasladó a Marcovich hasta el cruce de las rutas 9 y 347. En un escenario de película, la policía tucumana aguardaba bajo el puente de colectora de El Cadillal.
La transferencia del prófugo, que quedó en manos del Grupo Cero, se realizó con una estrategia para evitar que los periodistas de LA GACETA consiguieran imágenes del momento en que pasaban el detenido de un vehículo a otro. “No va a haber cambio de vehículos. Nosotros vamos a escoltar al vehículo de Salta a la Brigada”, dijo primero el comisario Jorge Dib. “Esperen más lejos”, dijo luego el policía, que momentos después subió a una camioneta particular y se fue en dirección al Norte. Minutos más tarde, las camionetas del Grupo Cero arrancaron y regresaron a Tucumán. Los periodistas las siguieron,
Poco después, un auto Renault Captur del Ministerio Público Fiscal (al que había sido trasladado Marcovich) apareció desde el Norte y pasó a gran velocidad, dejando atrás las camionetas del Grupo Cero y el móvil de LA GACETA.
A las 19.30, Marcovich pasó por una revisión médica en la ex Brigada de investigaciones. Bajó encapuchado del auto y pudo escucharse a una mujer gritarle reiteradas veces: “Marcovich ¿usted es inocente?”.
En esa dependencia policial, comisario Dib explicó que el detenido no había sufrido cambios significativos en su fisonomía desde 2017. “El único cambio de apariencia que observo es el propio al paso de los años. Con respecto a su enfermedad, podría decirse que está más flaco, pero eso lo determinarán los médicos”, manifestó. No se dio detalles de en qué circunstancias Marcovich fue capturado por la Policía de Salta, ni de cómo fue el operativo de su traslado.
A las 20, con las últimas luces del día, Marcovich volvió a escuchar cómo el portón del penal de Villa Urquiza se cerraba a sus espaldas.