A través de su cuenta de Instagram, Florencia Kirchner, compartió la primera foto con su hija, Helana, y acompañó la imagen con una larga reflexión sobre la "calificación de mala madre" y al "derecho a enfermarse", en referencia al distanciamiento que le genera estar en Cuba, donde recibe tratamiento médico.
"Decía una publicidad hace unos años: Mamá no se puede enfermar porque mamá -antes de las crías, llamada mujer- deja de ser persona cuando es mamá. Es mamá, ya está. Mamá. En teoría maduró, porque es mamá. En teoría es menos egoísta, porque es mamá", escribió Florencia en el inicio de la publicación.
Según Florencia, esa lectura la sigue marcando dos años después: "me sigue siendo abrigo poderoso contra el puritanismo con el que intentan envolverlos a lxs que nos salió una persona del cuerpo. Estamos militando por maternidades deseadas, sí. ¿Pero qué ocurre cuando una es madre? ¿Por qué tanto miedo da desmitificar lo que es una madre? Simple: porque nos juzgan de no querer a nuestrxs hijxs".
Sobre la distancia y su larga ausencia, reflexionó: "el año pasado por largos periodos no pude ver a mi hija y cuando venía tampoco podía estar tiempo completo. Yo no era buena para ella. Atravesaba fuertes crisis y dolores físicos. Me vomitaba en los pijamas la impotencia y no sabía si era mejor mi ausencia o mi presencia rota".
"Esta foto es de cuando ya pudimos -vernos-. De los días de saltar un poco la soga, de escuchar 8000 veces la misma canción y escribir juntas su nombre: Helena", indicó sobre la primera foto que publica con su hija.
La hija menor del matrimonio de Néstor y Cristina Kirchner, finalizó el post con un sentido mensaje: "te extraño H. El mundo no es lugar adecuado para estar tan lejos".
