Luis Gallagher: “Todavía hay mucha estigmatización en Salta, la conozco, la vivimos”
En una decisión histórica, a Luis y a su eposo Juan Manuel Vera les dieron la guarda de una bebé de seis meses, en adopción. Sus sueños y los desafíos de criar una nena en una provincia donde impera el machismo.
La historia de este hecho histórico comenzó cinco años atrás, con una cita a través de una aplicación de internet. Luis Gallagher conoció a Juan Manuel Vera.
Un matrimonio igualitario pudo adoptar a una bebé en Tartagal
“El primer día que lo conocí le dije que quería ser padre, que quería una relación buena, y él me dijo que quería lo mismo”, dice Luis Gallagher a LA GACETA. Está contento cuando responde, pero habla en voz baja: acaba de hacer dormir a la bebé y no quiere despertarla.
Después de la cita por internet vino el noviazgo, de más de dos años. Se casaron, finalmente, el 17 de febrero de 2017.
Aunque siempre habían soñado con ser papás, se postularon para adoptar recién este año. Muchos les habían dicho que los trámites eran arduos, difíciles, imposibles; pero no se desanimaron y descubrieron que en realidad todo es más sencillo y rápido de lo que dicen.
Se conocieron por una aplicación de citas, por internet. Estuvieron más de tres años de novios, se casaron
El primer día que lo conocí le dije que quería ser padre, que quería una relación buena y él me dijo que quería lo mismo
“Los trámites fueron bastante sencillos. Conozco mucha gente y muchos dicen que es difícil, pero la verdad es que es fácil. Hay que presentar un certificado de antecedente, es nacional, se puede hacer digitalmente. En un día está. Y después el certificado de convivencia, que se hace en una comisaría. Después hay que llenar un formulario, se pone hasta cuántos niños querés adoptar, el rango de edad, y si pueden o no tener problema de salud. De acuerdo a eso se hace la búsqueda. Nosotros marcamos dos niños, de 0 a 10, y que podían tener problemas de salud, que no fueran grave”, cuenta.
Sólo la pandemia ralentizó un poco los estudios ambientales y psicológicos, que se concretaron con todos los protocolos debidos. En julio terminaron de inscribirse y al poco tiempo le avisaron de una bebé que buscaba una familia, en Tartagal.
Juan Manuel dice: “Un hijo no importa cómo venga. El destino te termina uniendo. Es el indicado, es amor a primera vista. No importa que no haya salido de tu vientre, no importa que esperaras nueve meses, cuando te encontrás con esa criatura es para toda la vida”, dijo Vera. Y acotó con una definición de familia: “En donde vos te sentís libre de ser, para mí eso es una familia y eso es lo que tendría que existir dentro de la familia, donde te liberás y sos en tu máxima expresión”.
Cuando a Luis se le pregunta si soñaba más con un nene o una nena, no duda en responder: “me gustan más las nenas”. Y acota: “En este caso, me hubiera dado lo mismo, pero me gustan más las nenas”.
Luis también acepta que este es un mundo más duro para las mujeres. En esta provincia sobre el machismo y es por eso que Luis y Juan van a estar seimpre atentos a cualquier caso de bullying. “Yo tengo el deber de darle las herramientas que ella necesita para que ella misma pueda poner los límites y hacerse respetar y quererse ella misma. Sí, es verdad, todavía hay mucha estigmatización en Salta, la conozco, de hecho la vivimos, pero vamos a estar prevenimos, ver dónde mandarlas, qué escuela, hablar desde el primer momento”, dice.
Cuando se le pregunta qué sueña para ella, Luis responde que sabe que los hijos hacen sus propios caminos, trazan sus propios sueños. Por eso responde: “Yo quiero que siga un buen camino, que sea feliz, que nada la limite, que esté muy contnta de la vida que tiene y que viva en el amor, constantemente”.