Un desecho plástico puede demorar hasta 1.000 años en desintegrarse

Hasta 1.000 años. Esto es lo que puede demorar en desintegrarse la basura que genera una competencia deportiva de siete horas y que reúne a más de 3.000 ciclistas y a unas 15.000 personas entre público y asistentes.

Entre los desperdicios que quedan desperdigados en distintos puntos del circuito de mountain bike hay botellas de agua, envoltorios de galletas, vasos de telgopor y latas de gaseosa que permanecerán en la naturaleza por siglos si nadie las recoge. Y no es una exageración.

Tras una competencia de este tipo, lo habitual es encontrar entre los desperdicios plástico en sus diferentes versiones: botellas PET, bolsas de supermercado, sachets de agua o envases de poliestireno. Se trata de material que no es biodegradable en la mayoría de los casos.

Ranking

En promedio, el 40% de la basura que arrojamos contiene algún plástico. Argentina genera por año más de 150.000 toneladas de plástico y según la revista de divulgación científica, Science, el país ocupa el puesto 28 en el ranking de contaminadores de mares con plásticos.

Siglos

Cualquiera sea se composición, un desecho plástico necesita entre 100 a 1.000 años para desintegrarse. Las latas de aluminio demoran entre 80 y 100 años y un chicle, cinco años. Si el desecho es de papel o cartón precisará un año, mientras que cualquier residuo orgánico, solo seis meses.