“El milagro moviliza las fuerzas más nobles del ser humano”

Monseñor Mario Antonio Cargnello dialogó en exclusiva con LA GACETA sobre la festividad religiosa y su relación con el Papa Francisco.

05 Sep 2014
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MARIO ANTONIO CARGNELLO CON LA GACETA. El Milagro está en una dimensión cultural profundamente humana. FOTO LA GACETA


Monseñor Mario Antonio Cargnello dialogó en exclusiva con LA GACETA sobre la festividad del Milagro. “Estoy convencido que el Milagro es un hecho que está en la raíz cultural de Salta porque los tiempos se marcan antes y después en el curso de un año normal de la vida de los salteños. El Milagro está en una dimensión cultural profundamente humana”.

Cargnello describe la actitud de los salteños durante el mes de setiembre, cuando se lleva adelante la novena y la procesión del Señor y la Virgen del Milagro que convoca a miles de fieles de toda la provincia. “El Milagro moviliza las fuerzas más nobles del ser humano. Primero la dimensión religiosa, el vínculo con Dios, la necesidad de evaluar cómo estoy parado en la vida, las cosas buenas que he hecho, lo malo que he hecho para pedir perdón y enmendarme”, dijo a LA GACETA. Para él, el Milagro se vive profundamente desde la dimensión cristiana, “en el rostro del señor del Milagro hay un encuentro con Jesús y con la la iglesia porque es toda la comunidad la que celebra”.

Según Cargnello, las peregrinaciones son un fenómeno actual. Si bien se realizan desde hace tiempo, especialmente las de San Antonio de los Cobres, Cachi o Nazareno, para él “las peregrinaciones transforman la sociedad. Tienen una raíz en el tiempo se han multiplicado en el número y en la organización. Superó lo que podríamos haber previsto”, dijo. “Se realiza una movida social y el fenómeno se produce hasta adentro: patrones y obreros vienen juntos compartiendo la experiencia”, agrega.

El Papa Francisco y el Milagro

El Arzobispo de Salta recuerda el gesto del Papa el año pasado. “Cuando los chicos del Bachillerato Humanista visitaron Roma y el Papa los mencionó en la audiencia, los chicos empezaron a cantar el himno al Señor del Milagro. Normalmente el Papa sigue hablando, pero él dijo “esperen” y los escuchó cantar y contestó un mensaje. A los diez minutos ya era noticia en Salta”, cuenta. A la noche pasaron ese mensaje en la pantalla gigante instalada en la catedral. Desde ese momento, esa escena se convirtió en la motivación del Milagro del año pasado. “El tiene un gran afecto por el Señor y la Virgen del Milagro”, relata y agrega, “nosotros siempre tuvimos un muy buen vínculo, muy cercano, me ayudó en momento muy difíciles”. En febrero el arzobispo pudo saludar personalmente al Papa Francisco en Roma. “La relación con el Papa es muy buena, yo lo aprecio mucho. Fue un encuentro muy lindo”, recuerda con cariño.

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