Cooperadora Asistencial: acusaciones y sospechas cruzadas

Pablo Outes, encargado del organismo, respondió con dureza a un pedido de informe.

20 May 2016
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Nuevo cruce. Ayer los concejales capitalinos del Frente para la Victoria pidieron un informe sobre unas declaraciones del encargado de la Cooperadora Asistencial, Pablo Outes, quien había manifestado que parte del dinero de su organismo había sido depositado en plazo fijo. Outes se anotició del pedido al ser consultado por LA GACETA y respondió con artillería pesada.

El edil Gustavo Serralta dijo a LA GACETA que el bloque justicialista solicitó información sobre esta inusitada, aunque no ilegal, medida. Se requería saber si la plata efectivamente estaba en plazo fijo, en qué banco, por cuánto tiempo y sobre qué recursos se había tomado esta decisión. También si esto había sido aprobado por la comisión de la Cooperadora.

Serralta manifestó que es importante saber si la decisión no significó una disminución en los beneficios que reciben las personas. “Yo lo que cuestiono es que ha habido quejas de merenderos, comedores, que recibían el plan pan casero, que se les quitó la harina, les dicen que no hay plata y sin embargo guardan dinero en un banco. Actúa la Cooperadora como si fuera una entidad financiera, cuando su función es ayudar socialmente", sentenció.

Outes no ocultó su sorpresa al ser consultado por LA GACETA sobre el pedido de informe. Luego confirmó que la Cooperadora depositó alrededor de $8.000.000 en plazo fijo, en el Banco Macro. El dinero, aseguró, es el resultado de ahorros de la misma Cooperadora y de adelantos que recibieron del gobierno nacional y de la misma provincia. “A medida que se van ejecutando se van retirando. Se hizo el depósito del dinero a fines de preservar el valor, que se pierde con la inflación”, señaló Outes.

El funcionario municipal resaltó que tienen todos los programas al día, que todo se está pagando y que no hay proveedor al que se le deba dinero.

“Hemos sacado los gastos superfluos del gobierno anterior”, enfatizó, explicando montos que resultaron de ahorro. Outes detalló algunos de esos gastos: “Alquilaban un gimnasio a una persona, le pagaban 100 mil pesos mensuales. Después tenían un programa odontológico, gastaban 450 mil pesos mensuales; nosotros los hemos reemplazado por programas preventivos. También había un lugar llamado El refugio, que fue reemplazado por el programa “Manos abiertas”, que trata a gente en situación de calle. Tenemos la misma cobertura de gente que ellos tenían en su época, solo que ellos gastaban 500 mil pesos mensuales y a nosotros nos sale 70 mil”, dijo y añadió que ningún programa se eliminó, sino que fueron reemplazados por convenios con instituciones que hacen y tratan la misma temática.

“También hemos reducido los gastos de alquileres. Había algunos alquileres que se pagaban y no se usaban”, enfatizó.

“Que Serralta se quede tranquilo, la plata del estado está y se ejecutan todos los programas. La plata está depositada a nombre de la Cooperadora, en el banco Macro, no se debe absolutamente a nadie, ni a comedores ni a ningún organismo”, concluyó y destacó que además de hacer ahorros, han renovado la flota de vehículos: “nos van a entregar siete vehículos nuevos. Dos camionetas, cinco autos… y dos colectivos”, dijo.

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