Juicio Trogliero: según los policías, los imputados mintieron al pedir auxilio

Eran otros testimonios esperados, porque los tres policías de la seccional sexta fueron los primeros en llegar a la calle del barrio El Huayco donde Javier Trogliero Álvarez fue asesinado a manos de Juan Carlos Gómez Paz, quien confesó el hecho alegando legítima defensa.

Los oficiales Jorge Ríos, Jorge Chávez y Ariel Apaza declararon en la cuarta audiencia del juicio en la que también están imputados Mario Del Barco y Sebastián Guitián por encubrimiento agravado, pese a que la querella sostiene que en realidad son partícipes.

Chávez aseguró ante el Tribunal que cuando preguntó qué había sucedido, le dijeron que había habido una pelea y que Trogliero se había lastimado con un vidrio, ratificando lo que supo declarar durante la indagatoria, cuando dijo que quien le había manifestado eso había sido Del Barco.

El oficial Ríos declaró que Guitián le dijo que había sucedido una pelea pero no se refirió a heridas graves, pero que después observó que Trogliero sangraba y advirtió que tenía heridas punzo cortantes, por lo que pidió inmediatamente una ambulancia.

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Los tres policías coincidieron en afirmar que la ambulancia tardó en llegar aproximadamente unos 25 minutos. La misma ya había sido solicitada por Del Barco cuando llamó por primera vez al 911, pero no se la convocó en urgencia porque no se denunció la gravedad de las heridas.

“Hoy todos los testigos policiales corroboraron que ellos (los imputados) mintieron a la hora de pedir el auxilio, mienten al hablar de un herido de vidrio, lo que trajo la confusión del pedido de la ambulancia que no se hizo en código rojo por la mentira de los imputados”, dijo el abogado querellante Darío Palmier en diálogo con LA GACETA, considerando que el balance de la primera semana del juicio fue positivo en cuanto a su teoría del caso.

Tanto Apaza como Chávez argumentaron que en su calidad de policías no están autorizados para llevar ellos mismos a un herido a un hospital y que tampoco pueden autorizar que una persona particular lo haga.