¿Cómo preparar la mesa navideña?

La Noche Buena es una celebración de fe, también un momento de encuentro, una noche para compartir y cerrar el año con buenos augurios para el próximo. Como toda cena, en especial cuando hay varios comensales, es importante saber organizarse para poder disfrutarla.

La especialista en protocolo y ceremonial, y asesora de imagen, María Bélen Bordon, nos cuenta algunos tips para preparar la mesa de Noche Buena teniendo en cuenta el significado de cada símbolo navideño.

Dicen que de este lado del continente adoptamos costumbres navideñas muy típicas de Estados Unidos, donde en esta época es invierno. Sin embargo, muchos objetos y, en especial, colores tienen un significado relacionado a los buenos deseos para el próximo año y, la vida. “Hay que pensar en transmitir en buen augurio y alejar los malos espíritus”, destaca Belén, quién también es integrante de la Asociación de Ceremonialistas de Salta.

Los adornos y colores navideños, símbolos de fe, unión y protección

“Las pelotas que colgamos en el arbolito es uno de los adornos más comunes en Navidad. La tradición nos dicen que imitan a las manzanas que colgaban de los arboles representando la abundancia y la fecundidad de la tierra”, resume la especialista en protocolo y ceremonial. Y la lista sigue:

Campanas: “representa la alegría del nacimiento del niño Jesús”.  

Estrellas: “representan la luz y la esperanza y se ubican en la punta del árbol para simbolizar su función de guiar por el buen camino. Según la tradición cristiana fue la que les anuncio la llegada del niño Jesús a los reyes magos y los condujo hacia su pesebre en Belén”.

Coronas: “su forma circular da cuenta de la vida eterna y de la unión familiar”. Muérdago: “es una planta que se utiliza para ahuyentar a los malos espíritus”.

Velas: “la tradición hace referencia al momento en que la virgen María trajo al mundo al niño a luz de una vela en el pesebre de Belén”.

Sobre los colores

“El verde significa de luz y vida y el rojo de los lazos de protección del hogar. El dorado es la luz que también simboliza a la estrella que guió a los reyes de oriente al nacimiento de Jesús”, explica Belén al tiempo que aconseja que esos colores estén presenten en la mesa navideña en las formas y motivos que elija el anfitrión o anfitriona.

La asesora de imagen también sugiere que para armar una mesa atractiva es importante hacerlo con tiempo, pensando en cada detalle. “Es el momento ideal para usar la vajilla delicada que tenemos guardada y que su combinación sea acorde a las copas, los cubiertos o el mantel. Una mesa debe ser puesta con placer y diversión”, agrega.

“En primer lugar hay que elegir un mantel que establezca el grado de formalidad e informalidad de tu comida. Las servilletas también cumplen un rol fundamental porque con su variedad de colores y texturas logran que la mesa sea soñada. Las copas, por ejemplo, le agregan gracia y elegancia. En una mesa debe haber tres la copa del agua, la copa de vino y la copa del espumante”, dice y advierte: “Si van a iluminar la cena con velas, tienen que ser no perfumadas para evitar que invadan la comida y los centro de mesa deben ser sencillo y bajos para que no tapen a los comensales”.