A puertas cerradas y con un pico de estrés, el cura Rosa goza de su libertad en Finca La Cruz
Conocé los detalles de cómo llegó el sacerdote a su lugar de residencia. ¿Qué dicen sus abogados de su estado de salud?
El padre Agustín Rosa Torino ya goza de su libertad en el monasterio de San José, ubicado en Finca La Cruz. Ayer pasadas las 18 horas, el sacerdote llegó a su lugar de residencia acompañado con dos de sus abogados defensores y según indicaron los letrados, sufre un “pico de estrés”.
En diálogo con LA GACETA, Virginia Cabral Duba, abogada defensora del sacerdote dijo que “el padre no se siente bien”.
“Le acabamos de tomar la presión y esta altísima. Ahora estamos esperando a que lleguen los médicos para que lo revisen” dijo la letrada en las puertas del predio ubicado a 30 kilómetros de la ciudad.
El religioso, a pesar de haber obtenido libertad por parte del juez del Tribunal de Impugnación n° 2, sigue acusado de abuso sexual gravemente ultrajante y ahora esperará su juicio en el monasterio apostado en las afueras de la ciudad.
En la casa ubicada en el kilómetro Nº 25 sobre la ruta provincial 48, hoy al mediodía ya se encontraba Rosa con sus abogados defensores. Además en el lugar estaba el cuidador de la casa.
¿Por qué recuperó la libertad la monja Alicia Pacheco, acusada de abuso sexual?
El sacerdote evitó hablar con los medios en la finca, a pesar de que ayer se mostró públicamente con varios de los feligreses de la parroquia de Santa Cruz en las puertas del penal de Villa Las Rosas, minutos después de obtener su libertad.
Esta mañana el monasterio permaneció en todo momento con las ventanas cerradas. En el jardín solo estaban tres perros que resguardaban la quietud del lugar.
La abogada defensora de Rosa insistió en que aún no hay precisiones sobre el juicio al sacerdote: “no hay requisitoria fiscal y ni siquiera está elevada a juicio la causa, ni hay pedido”, precisó.
NOTICIAS DE TUCUMAN
