El viernes pasado LA GACETA dio a conocer una supuesta estafa al IPS, de parte de dos cínicas privadas de Orán. Ambas instituciones habrían facturado al Instituto Provincial de Seguros de Salta, internaciones y estudios "truchos" que nunca se habrían sido realizados.

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Los delitos que se les podrían imputar a las clínicas son de falsificación de documentación, estafa y defraudación a la obra social, además de sustitución de identidad.

Según pudo conocer LA GACETA, el IPS haría esta semana una denuncia penal por estafa y fraude a la administración pública.

Mientras que, en términos administrativos, la información será puesta a consideración del directorio del Instituto. Según confirmaron fuentes consultadas de esta entidad, la sanción más grave es la expulsión del padrón de prestadores. “Sería un daño terrible para cualquier clínica o sanatorio si se tiene en cuenta que el 50% de la población de Salta que tiene obra social, posee el IPS”, dijeron fuentes del IPS y agregaron que otro tipo de sanciones que brinda son multas o suspensiones. “Pero la expulsión es irreversible. En Orán hay tres clínicas y nosotros estamos hablando de dos”, aseguraron.

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Todo comenó cuando una empleada del Instituto Provincial de Salud de Salta pidió su traslado de Orán a Salta. Cuando comenzó a trabajar en el área de control de facturación, una médica auditora le preguntó: “¿Así que te operaste en Orán hace poco?”. Ella, sorprendida, le respondió que no, a lo que su colega le mostró su ficha, la facturación, papeles y una firma. Ella desconoció todo y así empezó la investigación que derivó en más de 10 casos de estudios e internaciones que nunca fueron realizados.