Una nueva pulseada entre el oficialismo y la oposición se dio este miércoles en la Cámara de Diputados, donde el intento de realizar una sesión especial para avanzar con los proyectos que buscan frenar el tarifazo. La sesión especial había sido convocada por Agustin Rossi, jefe del Frente Para la Victoria y se sumaron con iniciativas similares el peronismo dialoguista y el massismo, Libres del Sur, Movimiento Evita y los diputados de izquierda
La misma estivo promovida inicialmente por el kirchnerismo y la izquierda no pudo avanzar, pese a la decisión de los bloques Argentina Federal y el Frente Renovador de sumarse a la sesión.
Pasadas las 11:46 los diputados opositores habían juntado 128 presentes para comenzar la sesión pero no lograron alcanzar el quórum necesario de 129. En ese escenario, el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, dijo que sólo esperaría ocho minutos más, aunque varios legisladores lo acusaron de “poca tolerancia” en comparación con sesiones donde el oficialismo busca el quórum.
Ante la demora en reunir el quórum, el diputado Alfredo Olmedo advirtió faltando diez minutos para el mediodía: “Ya se ha pasado el tiempo, yo estoy desde las 11 acá”, y aclaró que estaba a favor de la sesión, pero se quejó porque consideraba que se había caído diciendo que “una vez más la política fracasa; lamentablemente uno falta para sesionar”, señaló.
Finalmente la sesión se levantó en medio de un escándalo: el diputado del PRO Javier Pretto se acercó hasta la banca de Olmedo, que estaba dispuesto a acompañar la sesión, y el hombre de la campera amarilla abandonó abruptamente el recinto. “Chanta, corrupto, atorrante, papelón”, le gritaron cuando regresó, una vez caída la sesión.
"Yo no tengo negociaciones con nadie", se defendió Olmedo en declaraciones al canal C5N y negó que se haya levantado de su banca por pedido de un diputado del oficialismo. "Cuando yo sea presidente de la Nación los horarios se van a respetar", remató.