La fe de Miguel y Nicolás los llevó a peregrinar desde Cachi para pedirle al Señor y la Virgen del Milagro por la aparición de Luis Nolasco, uno de los 44 submarinistas que desapareció en noviembre del año pasado con el ARA San Juan.
El padre y el hermano de uno de los salteños que formaba parte de la tripulación empezaron a caminar la madrugada del domingo para llegar este mediodía a la Catedral Basílica de Salta.
Miguel afirmó que desde que supo lo sucedido con el submarino se pregunta dónde y cómo está su hijo, pero remarcó que peregrinó porque cree que “él puede aparecer”.
Entre más de siete mil personas que llegaron desde el Valle Calchaquí, los parientes del submarinista podían pasar desapercibidos, pero no. Desde que empezaron a caminar llevan un cartel que recuerda Luis.