El intendente de Campo Santo, Mario Cuenca, fue citado a declarar ante la justicia, en la causa en que se investiga al sacerdote José Aguilera, pues las denuncias que pesan sobre el cura son de hace 20 años atrás, cuando estaba a cargo justamente de la iglesia de Campo Santo.
Cuenca declaró ante la justicia Cuenca esta semana y detalló que en su momento en todo el pueblo se comentaba que había caso de abusos.
“Yo si veía chicos, que no eran de Campo Santo, dando vueltas en la iglesia”, dijo a LA GACETA el intendente.
Si bien el jefe comunal dejó en claro que él no fue testigo de nada, y que sólo escuchó las inquietudes de muchos vecinos por el accionar de Aguilera, también dio a conocer que pidió reunirse con el entonces el Arzobispo Moisés Julio Blanchoud y la transmitió la inquietud que había en la comunidad por Aguilera.
“Hablé de los problemas que tenía con él. Él hablaba de la moral y yo un día le dije que no tenía moral”, dijo Cuenca y añadió: “Aguilera estuvo más de seis años en Campo Santo. No era muy amigo de la gente, era muy elitista”, contó Cuenca.