En la última sesión de la Cámara de Diputados, legisladores del departamento San Martín denunciaron un nuevo brote de dengue en la región y el colapso del sistema sanitario por esta situación. Pese a los datos brindados por el Ministerio de Salud, que confirman 194 casos detectados y ninguna víctima fatal, desde el municipio dicen que la realidad es otra.
“Tuvimos un brote y hoy muchos vecinos están sufriendo las consecuencias de este virus”, dijo el intendente interino, Eduardo Leavy, a LA GACETA. En esta sintonía, el jefe comunal señaló que el hospital Juan Domingo Perón se encuentra “desbordado” por la cantidad de personas que asisten con cuadros febriles.
En Tartagal hay 194 casos confirmados de dengue
El hermano del diputado nacional y exintendente, Sergio Leavy, aseguró que detrás de este tema no hay ninguna cuestión política ni electoral y remarcó la necesidad “de trabajar para disminuir la cantidad de casos”. “La semana que viene vamos a realizar una jornada de descacharrado durante tres días para combatir al mosquito”, anunció Leavy.
Ayer, en su informe en la Legislatura el ministro de Salud, Roque Mascarello, detalló que de acuerdo a la información pública, en Tartagal hay 194 casos confirmados de dengue sobre un total de 670 pacientes febriles notificados. Sobre este punto, el funcionario remarcó que ninguno de los casos positivos provocó la muerte de personas.
Mascarello también se refirió a las denuncias de colapso en el hospital cabecera del departamento San Martín y desmintió a los legisladores provinciales. “En Tartagal se registran 2.4 consultas por hora médicas, cuando el mínimo son 4 consultas por hora medica”, agregó.
Nora Cannuni, senadora del departamento San Martín, dijo que en el norte salteño hay casos de dengue y coincidió con el ministro al asegurar que no se registra ninguna muerte por este virus.
El Gobierno dice que son 658 los casos de dengue, mientras en Tartagal alertan un brote
La legisladora hizo hincapié en las actividades que deben realizar los municipios para combatir al mosquito y evitar que la enfermedad se propague por los barrios, y cargó las tintas sobre aquellos jefes comunales que “no trabajaron bien” y “dejaron vencer” los insumos que mandaba la provincia para erradicar la enfermedad.