Hugo Moyano se reunió ayer con Axel Kicillof y Verónica Magario, la fórmula kirchnerista que aspira a pelear por la gobernación de la provincia de Buenos Aires. La imagen fue entendida como una muestra de apoyo explícito al ex ministro de Economía, que competirá contra María Eugenia Vidal en las primarias de agosto y en las elecciones generales de octubre.
"Nosotros hemos hecho un análisis muy profundo y la fórmula que garantiza cambiar esta situación es Fernández-Fernández", aseguró Moyano en diálogo con Luis Novaresio en radio La Red.
El sindicalista asegura que no se arrepiente de los años en que estuvo distanciado de Cristina Fernández de Kirchner. Dijo que lo hizo por convicción y que siempre cuestionó actitudes, pero no políticas.
"Yo estuve conversando con ella, las crisis nos enseñan cosas que uno a lo mejor ha producido sin darse cuenta. Yo creo que Cristina con la experiencia que tiene ha entendido que ha cometido errores como hemos cometido todos", analizó.
Moyano descartó que él o su hijo Pablo integren las listas del kirchnerismo y fue muy crítico con la gestión económica del gobierno. "Antes nos peleábamos por el mínimo no imponible y ahora nos estamos peleando por un plato de comida", graficó.