La IX Salta Expo Libro iniciará este miércoles 18 de septiembre, a las 20, en la sala Juan Carlos Dávalos de la Casa de la Cultura (Caseros 460), con un homenaje a la destacada música, docente y compositora Amy Patterson, oportunidad en la que se presentará un texto que reúne su legado.
Arranca el Woodstock de los lectores salteños
Amy Patterson, Obra Musical así se llama la obra, editada por el Fondo Editorial de la Provincia. Contiene aproximadamente 300 partituras de sus composiciones musicales, que fueron donadas al Archivo de la Orquesta Sinfónica de Salta y de la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil de Salta (O.S.I.J.S).
La presentación estará a cargo, Alicia Santillán, sobrina de Patterson y quien escribió el prólogo, y de la asesora de la Secretaría de Cultura, María Eugenia Carante. El espectáculo continuará con la actuación de los Conjuntos Infantiles y Juveniles de Música de Cámara de la O.S.I.J.S., que están a cargo de la profesora Tetyana Kozimirova, bajo la coordinación de Juan Muñoz.
Los jóvenes músicos: Bianca Timea Zerdan Karath en viola, Alessia Fiori en piano, Gabriel Enrique Mamani en violín y Nicolás Vaca en guitarra., interpretarán: Ronda de los animales, Zamba del Arbolito y la chacarera Palo Borracho, todas composiciones de la homenajeada.
Amy Patterson
Amelia Cabeza, hoy reconocida cariñosamente como Amy Patterson, arriba a Salta a principios de la década del 40. Era dueña de un legado familiar de músicos: hija de inmigrantes españoles, su abuelo Enrique Cabeza fue un prestigioso músico y docente de Almería, y su padre José Cabeza, un reconocido matemático, dibujante de planos y director de obras del ferrocarril, también fue un músico excelente. Se esmeró en educar a sus diez hijos, seis mujeres y cuatro varones, en esa y muchas disciplinas.
Casada con el periodista Guillermo Pelayo Patterson, a su llegada rápidamente se convirtió en un imponente referente cultural. Jóvenes ávidos de aprender técnicas instrumentales de guitarra, violín, bombón, técnicas vocales, etc. fueron sus leales discípulos.
Amy se había graduado años antes como profesora superior de violín y cantante lírica en el Conservatorio Clementi, y había logrado ser primera voz del elenco del Teatro Colón, mientras vivía en Buenos Aires.
Trabajó en varias instituciones educativas de nuestra provincia: Escuela Nocturna de Estudio Comercial Hipólito Irigoyen de Salta, Escuelas Zorrilla y Alberdi, y en el Instituto Peter Pan al que le escribió la obra teatral Las aventuras de Peter Pan, presentada exitosamente en Salta y Tucumán.
En 1945 compuso Gloria a Salta, oficializada por el Ministerio de Educación de la Provincia por Decreto N 5957/62 como marcha oficial de la provincia.
Fue parte de L.V.9, primero con un programa radial que constaba de recitales de Canto de Cámara, que tuvo gran repercusión y luego como pianista estable de los programas en vivo.
En 1957 fue nombrada directora del Coro Polifónico de Salta y durante su gestión creó el Coro de Niños Cantores. Con ambos cuerpos realizó recitales en plazas barriales, centros cultuales, asilos de ancianos y en todo espacio a donde eran convocados.
Fue primer violín de la Orquesta Filarmónica dirigida por el maestro Nelson Montero, que se creó en aquellos años.
Su creación artística fue vasta y generosa: incursionó por diferentes géneros musicales. Los temas infantiles ocuparon la primera etapa de su trayectoria creativa, debido a su vocación docente y su inmenso amor por los niños. Creó para ellos numerosas canciones que luego fueron editadas bajo el título de Alitas Musicales, aprobadas y difundidas por el Consejo General de Educación y entonadas por cientos de niños de casi todas las escuelas de Salta y del interior.
Además incursionó en otras temáticas musicales, entre ellos temas nativistas y también obras de mayor envergadura, sobre todo obras corales que permitían el juego de varias voces en exquisita armonía. La música folklórica fue también un baluarte para ella. Con esta temática realizó incluso música de ballet siendo la más representativa El Ballet de la Zafra, que consta de diez cuadros en los cuales se puede observar desde la germinación hasta la cosecha de la Caña de Azúcar
Toda su vida estuvo plasmada por una gran entrega amorosa: a los niños, a quienes les dedicó gran parte de sus composiciones; a animales, protagonistas destacados de su cancionero popular, a la provincia que la acogió cariñosamente en todos sus años de actividad, y a su creencia en un Ser Supremo al que siempre veneró y agradeció.