Las nuevas medidas del Ministerio de Seguridad a cargo de Patricia Bullrich y las declaraciones del candidato a vicepresidente por Cambiemos, Miguel Ángel Pichetto, generaron el repudio de muchos sectores.

Uno de ellos fue el grupo de Curas en la Opción por los Pobres, que pertenece al sector de la Iglesia Católica más identificado con las labores sociales en los barrios y zonas vulnerables.

A través de un comunicado indicaron que los dichos de Pichetto y las medidas de Bullrich son “dos pasos más de sectores del gobierno en la estigmatización y criminalización de los pobres”.

Además agregaron que esto “pareciera tener como objetivo hacer escarmentar a los pobres porque no los han votado y creen que no los votarán”.

El candidato a vicepresidente había manifestado que habría que dinamitar la Villa 1-11-14, lo que el grupo de curas calificó como una “expresión de violencia xenófoba y de odio a los pobres” indicando que es “una muestra más de los sentimientos que anidan en el corazón de quienes nos gobiernan”.

Sobre la medida de Bullrich en la que se exige que quienes viajen en tren presenten sus documentos a riesgo de ser detenidos, los religiosos opinaron que esto “reaviva una vez más el prejuicio de que los ladrones son pobres y los pobres son ladrones”.

Además aseguraron que “no es entre los pobres que viven los grandes traficantes, estafadores, explotadores y corruptos. Estos malviven con buenos perfumes y bien alimentados y mejor vestidos, pero no radica en eso la honestidad”.

Por último manifestaron su preocupación por los datos que indican un crecimiento en los niveles de pobreza. “Se calcula que para fin de año 40% de la población de nuestro país estará bajo la línea de la pobreza. Ya, en este momento, más de la mitad de los niños de 14 años o menos viven en esa situación. Nos duelen todos y cada uno de ellos”, expresaron.