MEXICO.- Las migraciones en busca de mejores condiciones de vida se vuelven cada vez más habituales en América. Ayer, cientos de centroamericanos se reunieron en la frontera que separa Guatemala de México para intentar ingresar al país.
El cruce efectivo se llevaría a cabo hoy e implicaría un gran desafío para el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador. En especial ante la promesa del gobierno por satisfacer las demandas de Estados Unidos y frenar el flujo migratorio en el territorio.
El motivo es que el presidente estadounidense, Donald Trump, ha amenazado en numerosas instancias con dañar económicamente a México -y al resto de América Central- si los migrantes logran llegar a su país.
La primer señal de esta caravana de extranjeros fue registrada el sábado, cuando pequeños grupos cruzaron el puente internacional Rodolfo Robles desde Tecún Umán (Guatemala) a Ciudad Hidalgo (México). Sin embargo, la Guardia Nacional mexicana repelió el intento de abrirse paso a la fuerza.
Al llegar a la zona fronteriza, el principal refugio para migrantes de Tecún Umán se llenó rápidamente. “Nos hemos estado organizando. Si cruzamos solos, nos van a atrapar y todo el sacrificio hecho sería en vano. En cambio, mientras más personas estemos reunidas mayores serán las oportunidades de pasar”, sentenció José Luis Cruz, trabajador automotriz de Comayagua (Honduras).
“A esas 600 personas se sumaron 1.300 más que interrumpieron su trayecto para descansar en un segundo refugio improvisado”, destacó el sacerdote local Alfredo Camarena. De acuerdo con los datos aportados por el Estado de Guatemala, desde el miércoles al menos 4.000 hondureños -en su mayoría de San Pedro Sula- han intentado ingresar al país.
Para impedirlo, los agentes federales de México dispararon gases lacrimógenos. Sin embargo, más de una hora después, si se habilitó el ingreso ordenado de mujeres que aceptaron regularizar su situación en el país para obtener un trabajo.
Antecedentes
Durante la semana pasada, las autoridades mexicanas decidieron reforzar el control fronterizo durante las 24 horas. El objetivo es evitar lo que ocurrió en 2018, cuando el flujo de migrantes que atravesó la frontera fue muy grande. (Reuters)