Los exportadores agrícolas de Tucumán siguen con atención las novedades comerciales que trae el Brexit. Ocurre que este viernes, tres años y medio después de la histórica votación en la que los ciudadanos británicos votaron a favor de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, la ruptura finalmente se habrá consumado.
En los hechos, las partes inician una ardua etapa de negociaciones para definir hasta diciembre aspectos cruciales como el tránsito de bienes y personas entre ellas. Si bien el 31 de enero no cambiará nada a nivel comercial, los términos negociados en el otro extremo del Atlántico podrían implicar grandes modificaciones -o no- para los productores locales.
“Creemos que va a cambiar la logística para exportar arándanos”, expresó a LA GACETA Federico Bayá, presidente del Comité Argentino de Arándanos, entidad que incluye a los exportadores tucumanos. “Hasta ahora, la producción argentina que se consume en Gran Bretaña ingresa por Países Bajos. Se paga el arancel del bloque allí y luego se mueve libremente hasta su destino”, explicó el empresario. En caso de establecerse un arancel externo entre el Reino Unido y la Unión Europea, el ingreso del fruto debería realizarse por medio de puertos británicos. Y eso no se sabrá -consideró Bayá- sino hasta diciembre. “La temporada 2021 es la que percibirá las consecuencias. Y para Tucumán es importante; representa casi el 45% de la producción total”, concluyó.
Más escéptico sobre las implicancias del Brexit en la economía local, Pablo Padilla, presidente de la Asociación Citrícola del Noroeste (Acnoa), estimó que aún “hay que esperar” para arrojar conclusiones que involucren al mercado del limón. “Reino Unido es un destino histórico; por ahora no hay nada que indique que vaya a cambiar la situación”, manifestó el directivo.
Consultado sobre la posibilidad de que el proceso europeo implique una oportunidad comercial para Tucumán, Padilla manifestó: “Depende de los acuerdos que se firmen. Nosotros vemos con buenos ojos toda baja de aranceles para ingresar a nuevos mercados”.
Por su parte, los productores de granos de Tucumán también esperan novedades de índole mundial, pero del acuerdo comercial entre China y Estados Unidos. “La mayoría de los granos se exportan a Asia, así que no nos afecta demasiado lo que ocurra con la Unión Europea. Pero habría que ver con los otros sectores”, dijo Roberto Palomo, vicepresidente de la Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor).
Una “gran oportunidad”
Para el economista Eduardo Robinson, el proceso del Brexit tiene pros y contras. “Esto puede dar la posibilidad de negociar acuerdos comerciales mano a mano con un país y no con todo un bloque”, expuso en referencia a la posibilidad de intensificar el comercio con un Reino Unido “independizado”. “Podría ser una gran oportunidad para revitalizar el flujo de comercio con el sector agroindustrial local. Como siempre, va a depender de la voluntad política para negociar”, ponderó el especialista.
A pesar de las potenciales ventajas para la Argentina, Robinson ve con preocupación la desintegración de la Unión Europea. “No sabemos si esto es un caso puntual o si la tendencia es la desintegración de los mercados comunes”, expresó. Y específicó: “El Brexit no nos cambia nada en el corto plazo. Hay que esperar a los nuevos plazos. Tucumán debe hacer un esfuerzo para mejorar su potencial exportador, que está centrado en el limón”.
A partir del 31 de enero
¿Qué sucederá?
El Reino Unido dejará la Unión Europea, aunque aún deberán definirse los acuerdos aduaneros y comerciales
¿De qué dependen las nuevas reglas?
De los tratados que firmen los diplomáticos de ambas partes hasta diciembre de 2020
¿El tránsito de personas cambiará?
Hasta el 31 de diciembre, las normas serán las mismas para los ciudadanos europeos
¿Qué pasaría con los exportadores?
En caso de no haber un acuerdo aduanero, las tasas y los puertos de ingreso se alterarían
¿Qué se espera?
Tanto el Reino Unido como la Unión Europea aspiran a conseguir hasta 2021 un acuerdo de libre comercio