Senadores opositores aliados de Cambiemos rechazaron hoy la creación de un impuesto extraordinario a las grandes fortunas del país, por considerar que los sectores de mayores riquezas "lejos de ser atacados tienen que estar fortalecidos para realizar inversiones".
Los senadores Juan Carlos Romero (Salta), Clara Vega (La Rioja), Lucila Crexell (Neuquén) y Carlos Reutemann (Santa Fe), que conforman un interbloque aliado a Cambiemos en votaciones de determinadas propuestas, pidieron un mayor funcionamiento del Congreso "para trabajar en todos los temas que preocupan a la sociedad y no sólo en iniciativas que acrecientan la grieta".
Así se refirieron a la iniciativa que el oficialismo analiza presentar en el Congreso para gravar con un impuesto por única vez a las 14.000 mil fortunas de todo el país.
En medio de la emergencia mundial por la pandemia de Covid-19 evaluaron que los sectores de mayores riquezas de la Argentina, "lejos de ser atacados, tienen que estar fortalecidos para realizar inversiones y contribuir a poner al país de pie nuevamente, luego de una crisis que ya existía y se terminó de profundizar por esta emergencia global".
Desde el Frente de Todos explicaron que el proyecto aplica sobre el "0,03% de la población argentina" y que "en el escenario más conservador, que es una alícuota del 1%, se recaudarían US$ 800 millones".
"Con esa mínima de 1% se podría incrementar en un 50% la asistencia prevista para las provincias en el marco de la crisis del coronavirus", estimó la diputada oficialista Fernanda Vallejos.
EN EL SENADO. Cristina pidió a la Corte Suprema definir como válidos los proyectos votados a través de videollamadas. TÉLAM
Por videoconferencia
La vicepresidenta de la Nación y presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, pidió a la Corte Suprema de Justicia una declaración de "certeza de constitucionalidad" para resolver si el Congreso puede sesionar por videoconferencia, a raíz del aislamiento social.
"Fue solicitada a la Corte una declaración de certeza de constitucionalidad, mediante la cual se expida acerca de si es legal una sesión online en aquellas materias que no puedan ser reguladas por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), como impuestos", dijeron los voceros a Télam.
Ante esa presentación, los senadores aliados de Cambiemos advirtieron: "repentinamente quieren forzar una sesión por teleconferencia sólo para evitar presentaciones futuras en contra del impuesto a los grandes capitales ideado por Máximo Kirchner".
Los reglamentos de ambas Cámaras legislativas prohíben las sesiones no presenciales en el recinto parlamentario, por lo que cualquier votación mediante la utilización de medios virtuales correría el riesgo de ser declarada nula.
Además, una reforma reglamentaria debería ser votada de manera presencial por los dos tercios de los presentes en el recinto, algo que en la actual situación de distanciamiento social preventivo parecería difícil.
La Constitución Nacional impide los DNU para el dictado de normas vinculadas con cuestiones penales, impositivas o electorales.