Por Ulises Rodríguez

PARA LA GACETA - BUENOS AIRES

Seguramente 2019 fue el año más prolífico en la carrera profesional de Hinde Pomeraniec. La periodista y escritora publicó su primera novela infantil: Lu, Lucy, Lucía; el ensayo Soy mi madre, soy mi hija, soy yo y, a fin de año, el libro Rusos de Putin.

Criada en el seno de una familia judeo-comunista, todo lo que pasaba en la Unión Soviética era tema de conversación en la mesa familiar; y lecturas como la revista Novedades de la URSS fueron frecuentes durante su infancia y su adolescencia.

- Desde aquel 2009 en que fuiste a Rusia para el trabajo del libro Rusos, postales de la era Putin a 2019, cuando volviste y lo contás en la versión ampliada Rusos de Putin, ¿qué fue lo que más te impactó en esa década transcurrida, tanto en avances como en retrocesos, de un país que lleva 20 años gobernado por Vladimir Putin?

- En lo que tiene que ver concretamente con Putin lo más sorprendente de estos últimos diez años es que él inauguró un modelo de liderazgo sin modales. Hay que entender que en Rusia el Estado es Putin. Por otro lado, una gran diferencia es el modo en que encontré la capital, Moscú. Súper moderna en muchos sentidos, a costa de represión, en muchos casos, pero en términos de inversiones y demás la ciudad está muy accesible.

- Una de las personas entrevistadas del libro remarca que Putin “les devolvió a los rusos el orgullo que habían perdido con la caída de la URSS”. ¿Es el ruso un pueblo nostálgico de aquel pasado comunista?

- No creo. Lo que sí hay es un orgullo histórico, un orgullo imperial que va más allá del comunismo. Los rusos entienden que ellos son mucho más de lo que el mundo los considera, para ellos el mundo está en deuda con lo que ellos son.

- Rusia es un país plagado de secretos, incluso la vida de Putin adscribe a misterios sobre su origen. ¿Es un país que se alimenta de secretos y mitos para contar su historia?

- El secretismo fue y es una política de Estado y eso se contamina a la vida de la gente. En general, en los trabajos, a las personas no se les pregunta sobre su vida personal, no está bien visto. En cuanto a Putin él considera que su vida privada no le tenía que importar a nadie y es a partir de ese momento que no se le hacen preguntas personales.

- La juventud rusa es un tema en el que hacés foco permanentemente en el libro. ¿Te quedó la sensación de que las y los jóvenes pueden propiciar una política o están demasiado adoctrinados y reprimidos?

- Hay mucha gente joven, cada vez más, que quiere otra cosa porque nació con esto y no tiene resto de homo sovieticus encima lo que hace que no tengan ese barniz auto represivo.

- El libro deja al lector con muchas ganas de conocer y andar por esos lugares de Rusia que describís. ¿Pensaste que además de una crónica sobre la vida en Rusia podía funcionar a la vez como una especie de guía para viajeros?

- En la edición de hace diez años había argentinos que leían el libro antes de viajar porque al no haber mucha información y libros sobre el tema les servía de guía. Siempre lo pienso de esa manera, incluso cuando escribo cosas más personales, cuando doy información estoy pensando con qué se va a encontrar el lector si llega a viajar y tengo siempre esa idea de llevarme al lector conmigo de viaje cuando hago crónicas de viaje.

- En un país con tantos servicios de inteligencia y espionaje en el que todos desconfían de todos, ¿llegaste a pensar qué podrían investigarte/perseguirte por andar preguntando sobre Putin?

- Es algo que me aparece en todo momento, incluso en el primer viaje tuve pesadillas. En un momento me desperté pensando que había entrado alguien y me había robado el pasaporte. Cuando entré esta última vez a Rusia tenía claro que ya había entrado y me preguntaron un par de cosas que otras veces no me habían preguntado.

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Perfil

Hinde Pomeraniec es periodista, editora y escritora. Licenciada en Letras, fue docente  en la Universidad de Buenos Aires. Durante veinte años trabajó como editora de Cultura y de Política Internacional en el diario Clarín. Actualmente es editora de Cultura de Infobae. Es autora, entre otros libros, de Katrina, el imperio al desnudo, Blackie, la dama que hacía hablar al país y, en coautoría con Raquel San Martín, de ¿Dónde queda el Primer Mundo? Es premio Konex en Periodismo literario y miembro de número de la Academia Nacional de Periodismo.