Esta semana, el Equipo Argentino de Antropología Forense -institución que se dedica a la búsqueda, recuperación y restitución de personas desaparecidas- incorporó a sus recursos de trabajo un software que compara múltiples marcadores genéticos, físicos y familiares.
El sistema permite aumentar la capacidad de realizar identificaciones (individuales o masivas) e implica un paso hacia adelante para cerrar baches históricos.
“Es un salto cualitativo porque el equipo no está solamente involucrado en la comparación de perfiles genéticos de víctimas de la desaparición forzada durante la dictadura cívico-militar. También trabajamos en desapariciones aisladas, en femicidios y en casos que involucren soldados de Malvinas. Continuamente se acumulan nuevos casos”, remarcó Carlos Vullo, coordinador del Laboratorio de Genética Forense del EAAF, en una entrevista con la agencia de noticias Télam.
El programa informático M-FISys representa uno de los sistemas de identificación más potentes del mundo y es capaz de cotejar referencias antemortem. “Es decir, las características de la persona desaparecida, fotografías, edad, altura, tatuajes, antecedentes odontológicos o de fracturas y fichas médicas”, explica Vullo.
Asimismo, el especialista aseguró que el equipo trabaja en muchas investigaciones internacionales. “En Paraguay comparamos permanentemente las bases de datos para identificar víctimas del stronismo. También analizamos información de Uruguay y la desaparición de migrantes en la fronteras entre México y Estados Unidos”, agrega el antropólogo.
El EAAF se fundó en 1984 con el objetivo inicial de identificar a las personas víctimas del delito de desaparición forzada entre 1974 y 1983. Desde entonces sus profesionales recuperaron más de 1.400 cuerpos y se logró aportar pruebas en la mayor parte de los juicios de lesa humanidad nacionales.