Sociedad

Recomendaciones para disfrutar de ríos, lagos y diques

Consejos de una guardavidas profesional para tener en cuenta, antes de aventurarse a nadar en aguas abiertas.
17 Feb 2015
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En este verano, los diques de la provincia fueron noticias no sólo por su atracción turística sino por las trágicas muertes de quienes fueron a disfrutarlos y no pudieron salir con vida.

En ríos, lagos y diques, es esencial tomar algunas precauciones. Por esto, Carolina Mitchell, guardavidas profesional, recomendó a LA GACETA tomar algunos recaudos, tanto grandes como chicos.

Si se trata de un niño que no sabe nadar, es fundamental que use un chaleco salvavidas, diseñado para mantener el cuerpo en la superficie y su cabeza por encima del agua. “El chaleco salvavidas no es lo mismo que el llamado ‘baywatch’ o ‘torpedo’ (flotador en su mayoría de color naranja mayormente usado por guardavidas). Un chico solo en el agua en pánico es capaz de soltarse del mismo para intentar llegar a la orilla”, aclaró la profesional.

Tampoco recomendó el bastón de goma espuma que suelen usar los chicos para flotar en el agua, dado que no está amarrado con nada. “Si se asusta, se hunde”, agregó.

“Ni siquiera las llamadas ‘alitas’ son seguras. Bastan 10 centímetros de agua y un minuto que nadie esté viendo para que un chico, que no tiene la suficiente reacción para reincorporarse, se ahogue si cayó boca abajo”, precisó Mitchell.

El chaleco salvavidas y la supervisión de un adulto responsable son las dos premisas más importantes a tener en cuenta cuando un niño ingresa al agua.

Para los adultos

“Hidrocución o popularmente corte de digestión”. Esto es lo que puede sufrir un adulto en aguas abiertas. Por eso la guardavida recomienda llevar un elemento de flotación (torpedo, rosca) por cualquier eventualidad que pudiera suceder.

¿De qué se trata la hidrocución?  Es un shock termodiferencial provocado por el contacto brusco de la piel y de las vías respiratorias superiores con el agua fría. Esto desencadena un reflejo de inhibición de la respiración y la circulación, ocasionando en la mayoría de los casos una parada cardiorespiratorio. “No está relacionado directamente con un proceso digestivo, aunque una comida copiosa antes del choque térmico puede aumentar las posibilidades de padecerla”, explicó.

“Un elemento de seguridad en el agua sujeto con una soga a un árbol o estaca en la tierra, ejemplo un salvavidas redondo o rosca, puede prevenir muchos disgustos”, advirtió la experimentada guardavida, quien se desempeñó como tal en Pinamar, la costa sur de España y hoteles cinco estrellas. Además, Mitchell es entrenadora del equipo de running/training de la Aguada.

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