En tiempos de aislamiento, las redes sociales se convirtieron en aliadas de los artistas para seguir compartiendo su arte y registrar canciones nuevas. Al haberse cancelado decenas de presentaciones ya programadas y con entradas vendidas, las reproducciones por internet cada vez suben más. Del escenario, pasaron a la pantalla.
Prácticamente hay lanzamientos de nuevos temas o adelantos de discos todos los días. La web es el espacio virtual donde los nuevos se codean sin distancia con los consagrados. Todos recurren a las mismas herramientas para conseguir audiencia, tengan proyección internacional o arraigo principalmente provincial. Así, en las últimas horas Lali Espósito presentó su nuevo single y video “Fascinada”, que formará parte de su próximo disco de estudio; al tiempo que Fito Páez lo hizo con “Maelström”, que integra su producción “La conquista del espacio”. Al lado, las tucumanas Vivi Vargas y Nancy Pedro adelantaron en las redes su versión de “Construcción”, el tema de Chico Buarque, agendado en su disco en dúo “De cuerpo entero”; y el pop del grupo Johny Boy despunta desde “Fiestas electrónicas”.
A toda hora
Desde su productora Alma Music, Gonzalo Soraire considera que este tiempo es la oportunidad perfecta para lanzar todo tipo de contenido digital. “Hubo un aumento acelerado de audiencia en las distintas redes y plataformas digitales a toda hora. Antes la gente tenía horarios puntuales para conectarse, por lo general era al medio día o después de las 19”, sostiene.
Su emprendimiento reúne a artistas de distintos estilos, principalmente tucumanos, sobre los que hace un repaso. “Los más escuchados dependen del género y la región. Si hablamos de rock nacional, sin dudas Luis Alberto Spinetta y a nivel local, Martín García con su disco ‘Mutar’. En folclore tucumano Alcides Núñez sorprendió con su CD ‘Volví’ y Jorge Darío Giménez, con su lanzamiento ‘Revuelo natural’; en lo tropical, Walter Salinas con ‘Un sueño hecho realidad’ y Patry con ‘No soy la misma’. Humor es para el Oficial Gordillo y Adolfo Nicolaus, y en el trap, John C es el más escuchado”, enumera.
Las variaciones del dólar dificultan pactar una tarifa fija para el precio de los discos en formato físico; por eso muchos artistas o consumidores prefieren escuchar música directamente por las plataformas. “Es importante que la gente se acostumbre a la tecnología y a usar Spotify, Deezer, iTunes y Amazon -indica Soraire-. Son bibliotecas con millones de canciones que circulan por el celular y no llenan la memoria”.
Cada reproducción significa un ingreso para el artista, por eso Alma Music ayudó a muchos artistas independientes a colgar su contenido en la red. “Descubrimos muchos talentos gracias a esta iniciativa. La música es importante en todo momento de la vida y en la cuarentena aún más. Te acompaña cuando estás feliz o triste, para hacer gimnasia, para cocinar, para limpiar, para reflexionar, para expresarte, para decir algo, para todo”, afirma.
Por parte
“Hay muchos artistas ya consagrados que lograron su popularidad cuando las redes sociales no tenían tanta importancia. Lo importante es que las plataformas digitales presentan contenido para todos”, opina Daniel Deleo, dueño de la productora de espectáculos que lleva su nombre.
“Es notable cómo disminuyó la venta de CD en el último tiempo, pero no ha desaparecido. Los fanáticos buscan atesorar esos productos y valoran su arte. Con un disco los artistas se expresan más allá de la música plasmada porque exponen formas, colores y fotografías. Ahora aumentó la reproducción digital. Ambas son importantes”, añade.
El lanzamiento de discos ahora es por partes: primero se dan a conocer algunas canciones acompañadas de un videoclip o un video con la letra de la canción y luego, con una fecha pactada, sale a la venta la producción completa. “Esta estrategia es muy aceptada y esperada por la gente -admite Deleo- Los singles que se lanzan primero hacen que la gente se emocione por lo que aún no conocen”.
El calendario 2020 de Deleo Producciones quedó suspendido en su totalidad hasta nuevo aviso. “El arte es esencial en esta etapa que vivimos. Encerrados, sin poder salir de casa y sin música, hubiera sido catastrófico. Nos une, nos conecta, nos sensibiliza y nos emociona”, destaca.
“Lo más sorprendente y triste es que la situación de los artistas es difícil, muchos se vieron en la necesidad de brindar shows por redes sociales para tratar de recibir la colaboración de la gente. Realmente duele esta realidad, pero comprendemos, valoramos y acompañamos esta cuarentena dentro de lo que podemos. De todo lo malo hay que sacar lo bueno. Conocemos personas que trabajan en espectáculos que, al no estar inscriptos como monotributistas, no han podido acceder a las ayudas del Gobierno -indica-. Hay muchos que deben ser atendidos y urge planear soluciones, nosotros nos enfocamos en brindarles algunas propuestas”.
Experiencias
Decenas de artistas alcanzaron números que rompieron récords con sus contenidos nuevos en cuarentena. “El 8 de mayo, Ariana Grande se unió a Justin Bieber para estrenar el video de la canción ‘Stuck with you’ para recaudar fondos ante la crisis. Se conectaron casi 200.000 personas y es la canción con fines benéficos que más recaudó en la historia, es una locura. Se cuenta las cifras de a millones”, cuenta Julieta Zelaya.
Noelia Suárez esperó el estreno de otro videoclip. “El 18 de mayo salió el video de la canción ‘Watermelon Sugar’, de Harry Styles. Fuimos más de 450.000 personas conectadas al mismo tiempo -recuerda-. No entiendo cómo no se colapsó la página, el video llegó al millón de reproducciones en menos de una hora”.
Verónica Tolaba, agente de prensa de músicos y producciones artísticas, insiste: “la música es vital y la cultura, un derecho; este aislamiento nos ayudó a encontrarnos con nuevas producciones y nos dio tiempo de revivir las viejas por redes sociales”.
“Pasar la cuarentena sola en casa es difícil; por suerte y aunque suene loco me sentí acompañada por los artistas que admiro. Me conecté a muchos estrenos de videoclips, escuché sin parar las canciones nuevas que sacaron, hice amigos por las redes y siempre hubo alguna persona conectada en un vivo de Instagram para entrar y no sentirme sola. Sin algunas iniciativas, no hubiese sobrevivido”, resume Agustina Arreguez.