Tras la aprobación del uso de ibuprofeno inhalado en algunas provincias, la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva plantó su postura y expresó que no debería ser empleado con fines terapéuticos porque no está comprobada su eficacia y puede poner en riesgo a los que lo están tratando.
“La pandemia COVID-19 ha puesto al sistema sanitario y a sus profesionales bajo un estrés nuca visto. Los intentos por encontrar terapéuticas para una enfermedad. Se han formulado un sin número de hipótesis que sin ser verificadas se han publicado como soluciones mágicas y han creado enormes y falsas expectativas de curación”, señalaron en el informe.
Asimismo, basándose en diferentes ensayos, indicaron que los datos presentados de espirometrías en pocos voluntarios son insuficientes para garantizar la seguridad de la medida y que carecen de fundamento.