Interpol rechazó una solicitud de detención del ex presidente de Bolivia Evo Morales, cursada por el Gobierno de ese país. La entidad consideró que los delitos de sedición y de terrorismo de los cuales se lo acusa tienen una connotación política.
El fiscal General del Estado de Bolivia, Juan Lanchipa, difundió hoy que la Interpol comunicó que no cumplirá con la activación del sello rojo que permite la detención y la extradición del ex presidente y líder del MAS, quien está refugiado en la Argentina desde diciembre del año pasado.
Se trata de la segunda vez que Interpol rechaza la solicitud de las autoridades contra el ex presidente del país andino de activar la notificación roja que alerta a servicios policiales de todo el mundo sobre fugitivos buscados a nivel internacional.
El pedido contra Morales, quien fue imputado por la presunta comisión de los delitos de terrorismo, de financiamiento al terrorismo y de sedición, se enmarca en la investigación por la planificación de cercar ciudades mediante movilizaciones populares, coordinada con dirigentes afines a ese instrumento político.
La acusación se basa en un video en el que se atribuye la voz de Morales para supuestamente incitar a bloqueos de ciudades en Bolivia, que organizaciones como Human Rights Watch (HRW) han considerado una prueba insuficiente para la gravedad de esos delitos.
Lanchipa explicó que la Policía Internacional argumentó que uno de los delitos que fundamentó el pedido es sedición, un cargo considerado como político por esa instancia.
“Cuando se incorpora la figura de sedición, como en este caso, Interpol interpreta que el delito es considerado de orden político, y nos hizo conocer que no van a poder llevar adelante la detención en tanto no se levante la tipificación de ese delito considerado, según la normativa de Interpol, de orden político”, explicó el fiscal. (Télam)