Ailín Cubelo Naval, una joven de 22 años, decidió ligarse las trompas porque no quiere tener hijos. Tuvo que cambiar de médico para realizarse la operación luego de que un profesional de la salud rechazará su pedido dos veces.
“Como a algunas personas el deseo de ser madres les es natural, para mí era natural no serlo. Me ligué las trompas porque no quiero tener hijos, ni ahora ni nunca”, contó en diálogo con Infobae. Asimismo, remarcó que ante las preguntas que les hacían de: ´ ¿Querés ser madre? ´ siempre respondía “después de los 30 o solo quiero tener uno”.
La joven sostuvo que en aquel momento no se dio cuenta que quizás no quería ser madre y se excusaba o alargaba los plazos con sus respuestas, pero cuando cursaba el secundario lo entendió por eso decidió hacerlo.
“¿Traer una persona más a este mundo, así como está, a formar parte de esta sociedad, con esta escasez de recursos?, ¿vivir con miedo de que le pase algo si es mujer y con miedo de que haga algo si es varón?, ¿tener un hijo para dejar un legado? ¿qué legado?”, agregó.
Ailín subrayó que muchas personas le comentaron que si hubieran tenido la información que ella tuvo hubieran elegido no tener hijos. De la misma manera, aclaró que, si llegase a arrepentirse de su decisión, que duda que le pase, tiene la opción de adoptar para atender a los niños que tienen necesidades reales.
“La maternidad no debería ser una imposición social. Yo no juzgo a quienes eligieron ser madres, no voy por la calle diciendo ‘ay, ésta cómo se cagó la vida’, ‘está re loca’, ‘¿cómo va a tener tres hijos?’. Creo que es hora de sacar el juzgamiento sobre las personas que no queremos reproducirnos. No somos bichos raros, somos un montón que, el día de mañana, no nos vamos a lamentar por no haber hecho con nuestras vidas lo que queríamos”, finalizó la joven.