Desde dentro de la Parroquia de la Santa Cruz cuestionan el hermetismo con el que se manejan los representantes del Vaticano dentro de la Iglesia.
El obispo de Quilmes, Lucio Stöclker arribó a Salta este lunes acompañado de un asistente, para investigar la veracidad, o no, de la denuncia que pesa sobre el Padre y que se habría realizado en los días posteriores a la festividad del Señor y la Virgen del Milagro.
Desde dentro de la Parroquia de la Santa Cruz cuestionaron el hermetismo con que se maneja el Comisario Apostólico en la Iglesia de la calle Santa Fe 1247. Aseguran que “no conoce la Parroquia; tampoco la Orden”, y esto haría más difícil emitir un veredicto sobre la culpabilidad o inocencia del Padre.
LA GACETA pudo saber que Agustín Rosas permanece en silencio dentro de la Parroquia, sin celebrar misas, y que solo mantiene diálogo con los integrantes de la hermandad San Juan Bautista, que residen en el Tempo. Asimismo, fuentes allegadas al párroco comentaron que “sufre por la acusación, pero es un Padre obediente. Si le piden que se vaya de aquí, lo hará”, dijeron.
Por estas horas la parroquia de la Santa Cruz continúa empapelada con carteles y frases de apoyo al sacerdote.
Vecinos expresaron su apoyo al sacerdote y colgaron una gigantografía del sacerdote en el frente de la Iglesia.