El Senado de la Provincia tratará el proyecto, que llega con media sanción desde Diputados, para establecer en el territorio provincial la prohibición de conducir vehículos bajo los efectos del alcohol o cualquier otro tipo de sustancia que impida hacerlo de manera adecuada.
El dictamen, que se analizará en la sesión de hoy, estípula que por conducir en estado de intoxicación inferior a 0,2 gramos alcohol por litro de sangre se aplicarán multas que van de las 100 a 300 unidades fijas -cuyo valor se determina con el precio de la nafta premium-, con posibilidad de acceder al pago voluntario. También se retendrá la licencia de conducir.
Por conducir en estado de intoxicación alcohólica superior a 0,2 gramos de alcohol por litro de sangre, la sanción irá de 100 a 300 unidades fijas, sin el beneficio de pago solidario. Además se retendrá la licencia de conducir y se restarán cinco puntos del sistema de scoring. El conductor podría quedar inhabilitado durante un período de dos a seis meses.
Para quienes conduzcan con un grado de alcoholemia igual o superior a 0,5 gramos por litro de sangre las multas se elevarán desde 300 a 800 unidades fijas, se retendrá la licencia de conducir, se descontarán 10 puntos del scoring y el conductor quedaría inhabilitado entre seis meses o un año.
Aquellos que registren un grado superior o igual a un gramo de alcohol por litro de sangre serán sancionados con multas que van de las 800 a 1.000 unidades, se retendrá la licencia restándole 15 puntos de scoring y podrán quedar inhabilitados por seis meses o un año.
El proyecto también cuenta con una arista interesante, que compromete al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología para que las normas de Seguridad Vial se incluyan dentro de la curricula escolar.