En el día que el Consejo de la Magistratura de la Nación resolvió suspender al juez federal Raúl Reynoso y enviarlo a juicio político, el magistrado dijo sentirse dolido por el dictamen y que sospecha que hay “otros intereses”  detrás de esta acción.

“Me duele la manera que me han atacado y me duele que por una causa en la que me han amenazado,  por eso, me suspenda”, manifestó el juez en una entrevista para la radio Cadena Máxima.

“Obviamente esa no es la  justicia que quiero ni por la que tanto estudié, pero somos seres humanos; quienes han de juzgarme son también seres humanos no todos tienen virtudes, algunos tienen defectos. Quizás haya otro interés que sospecho y que quizás otro día lo pueda develar por qué quieren que no esté el juez Reynoso”, continuó el magistrado, acusado por David Mazzutti por abuso de la autoridad y mal desempeño.

Reynoso aseguró que fue amenazado por esta persona y que en su momento él se inhibió de seguir la causa.

Ni llantos, ni lamentos

“Si alguien desea al cargo de juez federal que lo tome, yo no voy a llorar ni lamentar esto. Tengo más de 31 años trabajando en la Justicia, no me arrepiento de lo que hice”, expresó el magistrado, que además está imputado por liderar una supuesta asociación ilícita que se encargaba de cobrar coimas para excarcelar narcotraficantes.

En este caso, el juez y otros abogados están acusados de formar parte de esta organización. Al respecto dijo: “cuando vaya esta causa a la Cámara de apelaciones, los camaristas van a ver que no tengo ninguna responsabilidad”.

Enumeró luego la cantidad de droga que se secuestró por orden de su juzgado (25 mil kg.) y el número de imputados por narcotráfico (20 mil) que hubo durante los años en los que estuvo al frente de esta dependencia de la justicia en Orán. Contó que por esto, él y su familia sufrieron amenazas y tentativas de secuestros.

“No voy a llorar si me destituyen –insistió- voy a luchar por demostrar mi inocencia… No soy jefe de ninguna banda ni organizador de ninguna asociación ilícita ni autor de cohecho. Se va a demostrar que no tengo nada que ver con esto”, sostuvo.

Ante estas acusaciones apuntó contra el abogado David Leiva, quien –según el juez- es la cuarta vez que lo acusa de delitos. “Buscan réditos, fueron mediocres las tres denuncias anteriores que fueron rechazadas por falsas”, agregó.

Por último, dijo que confía en la justicia y que tiene la conciencia tranquila. “Yo salgo a caminar sin custodia y la gente me abraza dándome su apoyo”, relató.

Desde el Consejo de la Magistratura explicaron a La GACETA que ahora resta notificar por escrito al juez del dictamen. Luego será la Cámara de Apelaciones de Salta que deberá determinar quién será el juez subrogante que reemplace a Reynoso para atender el juzgado.

El abogado del juez, Federico Magno, detalló que este órgano tiene 180 días para acelerar el juicio, mientras el acusado no deja de ser juez y tampoco pierde los fueros, por lo que no puede ser detenido. Los consejeros Luis María Cabral y Adriana Donato oficiarán como fiscales en este proceso.