Un mes y medio pasó desde que se conoció la investigación hasta que el juez de Orán fue relevad de su cargo.
En 49 días pasó de todo. El juez federal de Orán, Raúl Juan Reynoso, pasó de ser un heroico paladín de la Justicia en la frontera norte argentina a ser removido de su cargo por mal desempeño y procesado como presunto líder de una asociación ilícita que beneficiaba a detenidos narcotraficantes a cambio de bienes y dinero.
Todo comenzó el 4 de noviembre, cuando a media mañana, en un mega operativo con oficiales de la Policía de Seguridad Aeroportuaria,
se allanó el Juzgado de Orán. El procedimiento, ordenados por el juez federal salteño
Julio Bavio a instancias del fiscal de distrito (
Eduardo Villalba) y de la Procunar (
Diego Iglesias), se extendió también al domicilio de un colaborador del juez y a un grupo de abogados, acusados de integrar la organización.
Desde aquél allanamiento que destapó el caso, se sucedieron una serie de hechos que terminaron todos los imputados procesados (más los hermanos César y Rosalía Aparicio) y embargados por varios millones de pesos.