El titular de la Procunar, Diego Iglesias, calificó al caso del juez Raúl Reynoso como una instancia en el que la narcocriminalidad corrompe a la administración pública. Además admitió que “es imposible ganarle al narcotráfico”, dada la estructura económica que sostiene a organizaciones.

Entrevistado por el diario La Nación, Iglesias caracterizó al caso del juez de Orán como “aislado, pero producto del sistema”, dado que hay un solo juez federal en una jurisdicción “tan complicada, con tanta incidencia del narcotráfico”. Caracterizó además al distrito del norte salteño como una jurisdicción que “no presenta geografía complicada para ser vulnerada”. 

Desde la Procunar, Iglesias impulsó el procesamiento a Reynoso en noviembre de 2015, resuelta por el juez Leonardo Bavio por considerarlo autor de “asociación ilícita, concusión y precavirato”. Creada en 2013, esta área del Ministerio Público maneja más de 21.000 causas federales vinculadas a la droga y el 50% de éstas corresponde a delitos graves: comercio, transporte, almacenamiento y contrabando de estupefacientes.

“Pretender ganarle (al narcotráfico) es una lucha desigual, despareja y perdida”, comentó resignado Iglesias y utilizó el caso de Reynoso para destacar que la vulnerabilidad de las fronteras se ve agravada por una instancia en la que la máxima autoridad judicial tiene complicidad. “Eso demuestra que el narcotráfico va por todo”, remarcó el funcionario.

Iglesias además alertó sobre la incidencia de la narcocriminalidad, una actividad a la que calificó con alcance no solo comercial, sino financiera y con gran penetración en los eslabones judiciales, policiales y políticos. 

“Tenemos deficiencias estructurales frente a organizaciones que no tienen ningún tipo de límite económico para operar”, denunció el funcionario quien además indicó que en Argentina existen causas que comprueban la existencia de células de carteles narcos provenientes de México o Colombia. 

Finalmente, en la entrevista concedida al diario nacional, Iglesias determinó cuatro puntos que según su experiencia ayudarían a luchar contra el narcotráfico: 1) federalizar la persecución global de los delitos; 2) apuntar a las cabezas en las cadenas de responsabilidad; 3) perseguir los desvíos de los precursores químicos y 4) investigar el patrimonio de los involucrados.