Si el gobierno nacional la acepta, el magistrado quedaría sin fueros y podría quedar detenido.
El juez federal de Orán, Raúl Reynoso, presentó su renuncia ante la subsecretaría de Relaciones con el Poder Judicial del Ministerio de Justicia de la Nación, a cargo de Juan Mahiques.
El gobierno nacional ahora deberá analizar la dimisión del magistrado que estuvo 10 años frente al juzgado de frontera del norte salteño y que en noviembre de 2015 fue procesado por su supuesta participación en una banda que beneficiaba a narcotraficantes.
Reynoso es el único de los ocho procesados por dicha causa, sobre el que pesa el pedido de prisión preventiva y si el gobierno acepta la renuncia, el juez podría quedar al borde de la prisión ya que no gozaría del beneficio de fueros.
La investigación contra el suspendido juez federal Reynoso, que tiene bajo su jurisdicción la frontera caliente del contrabando, fue impulsada por los fiscales Diego Iglesias, a cargo de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), y Eduardo Villalba.
"Reynoso dirigía y coordinaba la asociación de carácter estable, con soporte estructural, división de roles, regulación interna de las facetas de organización, liderazgo, con la capacidad para articular acciones de modo de sostener el desarrollo de la actividad ilícita", habían sostenido los representantes del Ministerio Público Fiscal.
Al borde de la prisión
Reynoso ya no estaba ejerciendo como juez en Orán, ya que el Concejo de la Magistratura lo había suspendido en diciembre pasado por mal desempeño por otra causa que no estaba asociada a la liberación de narcotraficantes.
A mediados de marzo, la Cámara Federal de Apelaciones de Salta confirmó el procesamiento del juez y otras siete personas por formar parte de una supuesta asociación ilícita que beneficiaba a detenidos por narcotráfico a cambio de dinero y bienes.
Dicha resolución dictaminó que Reynoso sería el único procesado sobre el que pesaría el pedido de prisión preventiva, pero que no se hará efectiva hasta tanto el juez conserve sus fueros. Los jueces que conforman la Cámara ratificaron el pedido de detención expresado por el juez federal Leonardo Bavio en virtud de que “las constancias examinadas mostrarían que ha propendido con su actuación a facilitar la impunidad e incluso la fuga de integrantes de organizaciones criminales de envergadura provocando con su accionar un daño social inconmensurable” y porque consideraron que cuenta con los medios y recursos necesarios en caso de querer ausentarse de la justicia y obstruir la investigación.
“Estoy rogando no quedar injustamente preso”
En marzo, Reynoso se mostró preocupado por su posible detención y en diálogo con LA GACETA contó que estaba angustiado y que se estaba realizando estudios médicos porque su salud se había deteriorado por su procesamiento.
Entre la decepción por las acusaciones que recibió de parte de colegas con los que compartió varios momentos de su vida, como así también de personas que trabajaron con él, Reynoso negó enfáticamente haber recibido beneficios económicos a cambio de sus resoluciones judiciales. Afirmó que sus fallos siempre fueron acorde a la ley aunque pueda discutirse su valoración, sin perjuicio de reconocer que pudo haberse equivocado en alguna decisión. De todas formas, confirmó que hay un apresuramiento en condenarlo y que todo se ha interpretado en su contra.