Sueña con llegar a esa gran pasarela, lucirse y representar a Salta y a su país en el mundo. Desea además seguir ayudando a quienes más lo necesitan desde el lugar en el que se encuentre. Para ella todo es posible, y por eso la conjugación modelo-bombera es perfecta.
A los 13 años, Abigail Jorge incursionó en el modelaje, desfilando y posando para las cámaras. Ahora tiene 18, mide 1,78 y busca ser la candidata salteña de Miss Universo Argentina.
Mientras sus fotos son promocionadas en el sitio oficial del certamen internacional, para que el público la vote y pueda ser la elegida de Salta, Abigail integra el cuartel de bomberos voluntarios de Villa Luján. Desde abril, a la par de sus compañeros, sale a sofocar incendios y auxiliar vecinos.
Si bien pareciera que las dos carreras van por caminos opuestos, la joven entiende que perfectamente pueden ir de la mano. “Sorprende tanto en el ámbito de los bomberos como en el ámbito del modelaje, porque son cosas totalmente distintas: en un lado no hay que ensuciarse y en el otro todo lo contrario, pero lo llevo bien, me gustan las dos cosas”, asegura.
“Me gusta ayudar, y sea de la forma que sea, porque también utilizo el modelaje para el mismo fin, y si llegara a viajar o ganar algún concurso también sería con este fin”, agrega la joven, quien cuenta que desde muy chica se acercó a causas solidarias, incentivada por su familia cristiana y por el colegio al que asistía.
¿Por qué le gustaría ser Miss Universo Argentina?, se pregunta en la página del certamen. Y en tres líneas contesta: Me gustaría ser Miss Universo porque creo que es un lindo medio para ayudar a personas que lo necesiten y mostrar que también importa la belleza interior, es un sueño que quiero cumplir desde que tengo 13 años.
Abigail recuerda que al finalizar la secundaria realizó el curso de capacitación y rindió para ser bombera profesional. Así es que hoy la joven se calza el equipo y el tubo de oxígeno para salir en la autobomba hacia un incendio o una vivienda en urgencia.
“Me tocó ir más a incendios de pastizales; y sí, la primera vez, te agarra algo de miedo con el calor y al sentir sofocación… A casas también fui, pero no por incendios, sino fugas de gas, las que también son experiencias de adrenalina”, cuenta con simpatía la salteña, la misma que posa sensual ante la cámara de un fotógrafo y en otras ocasiones corre para apagar el fuego en la ciudad.