El escándalo por los supuestos abusos sexuales en los que estaría involucrado el padre Agustín Rosa, de la parroquia de la Santa Cruz, junto a sacerdote Nicolás Parma tendría novedades en los próximos días a partir de la declaración de nuevos testigos.
La fiscal a cargo de la causa, María Luján Sodero, busca establecer los hechos denunciados y entre las medidas judiciales que dispuso fue la ubicación y declaración de testigos mencionados por las supuestas víctimas de los abusos.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, la investigación surgió a partir de las acusaciones expresadas por dos ex integrantes del instituto religioso que presidía Rosa, quienes “refirieron hechos de abuso sexual, consistentes en tocamientos, como así también violencia verbal y psicológica a partir de sucesos en los que eran humillados, ya sea por su condición dentro de la comunidad”.
Además declararon que algunos integrantes de la comunidad “eran tratados como esclavos y que no recibían atención médica o contención, cuando sufrían alguna enfermedad. Incluso revelaron otros detalles respecto al manejo de dinero de parte de los acusados”.
Finalmente la fiscalía detalló que algunos testigos se encuentran fuera de la provincia y del país, pero que este miércoles una de las denunciantes volverá a presentarse para ampliar su testimonio, ya que en su declaración señaló que habría más víctimas de abuso sexual.