El cáncer fue su motivación. Más allá del topetazo que puede generar la palabra, y la enfermedad por sí misma, Fernanda y un grupo de amigas atravesadas de distintas formas por alguna patología oncológica decidieron transformar la experiencia del tratamiento en un gesto de amor. Realizan pelucas para donar a quienes pierden el cabello por efecto secundario de la quimioterapia.

Las reuniones comenzaron en diciembre pasado. “Básicamente nos juntamos para armar esto porque, nosotras o por temas familiares pasamos algún cáncer”, explicó a La Gaceta, Fernanda Medina, quien hace seis meses le diagnosticaron cáncer de mama,  

Empezaron haciendo peluquitas para niñas con tela de modal y lana. Hasta que, investigando sobre el tema, se contactaron con un peluquero que confecciona pelucas con pelo natural y hoy las ayuda en esta empresa solidaria.

“Apuntamos a niñas y mujeres en tratamiento oncológico; si bien no en todos los casos en la quimio se tiene como efectos colaterales la pérdida de pelo, hay chicas que se ven afectadas, dejan de salir o de participar de sus actividades. Por eso las pelucas. Para que la mujer se sienta segura, bien y se mantenga activa”, comentó Fernanda, que transita la quimioterapia ayudando a otras personas. Pese a que ella no perdió su cabello, sí se  vio reflejada y motivada por pacientes que conoció en los consultorios donde realiza su tratamiento.

Según contó, esta acción solidaria ya se realiza de manera organizada en Rosario y Buenos Aires. Inspiradas en lo que es exitoso en otras ciudades, estas amigas se proyectaron conformar una fundación.

Mientras tanto, recolectan mechones para armar pelucas para entregan gratuitamente a quienes perdieron el cabello. Es que, mínimo, se necesita 4.000 pesos para una peluca de pelo corto. Una suma que pocos cuentan, en especial durante un tratamiento de quimioterapia.

Ahora “estamos armando siete peluquitas para mujeres del Materno infantil”, agregó Fernanda, que además está organizando una nueva campaña en el mes de la mujer.

Bajo la consigna “un mechón por una sonrisa” se busca recolectar más cabellos y visibilizar el tema, a fin de prevenir y promover la detección temprana para curar el cáncer. En el Parque Bicentenario, el sábado próximo, a partir de las 16, se llevará a cabo un festival en el que se podrá bailar, divertirse y colaborar. Allí habrá zumba y actuarán artistas locales que se sumaron a la iniciativa desinteresadamente.

“Se necesitaría 15 centímetros de cabello, de un mechón, puede ser teñido o con permanente, porque igualmente luego se selecciona, se empareja, se le hace shock de queratina y se desmecha o se hace corte carré”, explicó Fernanda, que aclaró que para participar del evento no es necesario donar un mechón. Este gesto es voluntario. También se puede donar tela modal o lana para las pelucas de fantasía que realizan las doce mujeres que integran este grupo solidario llamado “Lazos de Amor”.