La demanda de préstamos personales y para capital de trabajo a través de servicios online de empresas fintech registró un fuerte crecimiento en los últimos meses y las empresas se lanzan con más productos que apuntan mayormente al sector no bancarizado que necesita acceso al crédito para necesidades puntuales de dinero extra o para impulsar pequeños emprendimientos.
“Vemos un mercado muy grande y creciendo mucho, en los últimos 12 meses nosotros multiplicamos por tres los préstamos otorgados, es un reflejo de que hay un mercado desatendido, que necesita una solución. Nuestra visión es tener un abanico de servicios financieros. Hay muchos servicios fintech que creemos que podemos agregar valor”, dijo Juan Pablo Bruzzo, cofundador de Moni, una plataforma que ofrece prestamos personales de hasta $7.000, sin papeles, que se acreditan en el día.
Según un informe de la agencia Télam, Moni comenzó en 2014 con el producto de préstamo a 30 días y este año incorporó la posibilidad de pago en 3 cuotas y hasta 12 cuotas para algunos clientes que tienen buen comportamiento con la plataforma.
“Empezamos con el primer producto que era un adelanto, un préstamo a corto plazo, para salir de algún problema, sustituto de pedir un adelanto a jefe o familiar, que hoy son $ 5.000 y lo estamos subiendo a $ 7.000, ajustado por inflación en los últimos tiempos”, detalló Bruzzo.
En este contexto, destacó: “en 2014, el 30% de pedidos eran por celular y hoy supera el 75%. Nunca había visto un hábito de consumo cambiar tan rápido, creo que es un comportamiento que se está viendo a nivel general y en Moni se multiplica porque es muy simple el proceso, a través de la app nativa de Android”.
La propuesta de préstamos online es atractiva por su inmediatez y porque se hace todo el proceso por internet, sin necesidad de papeles, pero además abre el abanico a personas no bancarizadas porque el scoring se realiza con fuentes tradicionales -como datos del BCRA y el Veraz-, pero también con variables blandas que los bancos no contemplan, como perfiles de redes sociales, que permiten a las fintech definir el perfil del solicitante. En cuanto a los costos, Bruzzo señaló: “para el monto más alto de $ 7.000 cobramos un cargo fijo de alrededor de $ 400 y una tasa de interés de 59% anual”.
El rol del móvil
También en el segmento de préstamos para consumo, la plataforma Vivus otorgó más de 100.000 préstamos en Argentina en 2016 y lleva entregados 340.000 en lo que va de 2017; cuando empezaron a operar en el país, en octubre de 2015, recibían 2.000 solicitudes por mes, hoy ascienden a 8.000.
Vivus -producto de la empresa mexicana 4Finance que planea desembarcar también en Brasil hacia fin de año-, aspira a otorgar en Argentina un total de 50 millones de euros hacia 2020.
Salvador Calogero, country manager de 4Finance en Argentina, señaló que los usuarios de Vivus toman entre 2 y 3 préstamos al año y destacó también la penetración del uso de móviles. “El móvil es la puerta de entrada, el 85% solicita a través de algún tipo de dispositivo móvil. El perfil del argentino es que usa mucho el teléfono y redes sociales”, dijo.
En el segmento de financiación online de capital de trabajo para micro, medianos y pequeños emprendedores se encuentra Moon MoneyOnline, que otorga préstamos directos de hasta un millón de pesos, a devolver hasta en 9 meses. En 2016, la cantidad de préstamos otorgados por Moon creció a un ritmo sostenido de más de 30% mensual y el volumen de capital otorgado creció a más de 45% mensual.
Mario López, cofundador y CEO de Moon, dijo que hay un mercado interesante que va creciendo a un ritmo sostenido. “Hay muchos negocios pequeños que necesitan y no tienen acceso al financiamiento. Siete de cada 10 empresas se autoexcluyen del sistema bancario, en parte porque es engorroso, requiere muchos papeles y los tiempos son largos. Con Moon el 57% de los préstamos son paperless y se acreditan en 48 horas”, señaló.
Otro caso es el de Afluenta, una plataforma online orientada al crowdfunding que funciona desde 2012 y que pone en contacto a solicitantes de crédito con inversores que tienen la capacidad para prestarles a personas con proyectos de consumo o a monotributistas y emprendedores.