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“Estoy seguro que ella querría que siga hasta el final”, dijo el viudo de Jimena Salas

Nicolás Cajal cuestionó la poca celeridad de la investigación del crimen en Vaqueros. Contó cómo vivió el día del asesinato y pidió mayor seguridad.
13 Jul 2017
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Pasaron más de cinco meses, y sin novedad alguna sobre los homicidas de Jimena Salas, el viudo de la mujer violentamente asesinada en su vivienda de Vaqueros, Nicolás Cajal, se puso al frente del escenario para reclamar justicia y conocer la verdad sobre este crimen que conmovió los salteños.

En diálogo con LA GACETA, Cajal habló sobre la decisión de sumar un fiscal más a la causa, el pedido de recompensa y el día del crimen; también sobre ella y él.  “Estoy seguro que Jimena querría que siga hasta el final y voy a seguir hasta el final, no hay opción”, manifestó el viudo en una extensa charla, en la que prefirió no hablar de sus hijas, “los dos grandes motivos para seguir adelante”, dijo.

Ante su reciente exposición en los medios, después de varios meses de la tragedia, Cajal aseguró que se debe a la falta de respuestas y al poco avance que ve en la investigación. “Si tengo que hablar con el que tenga que hablar, voy a hacerlo. A mí, por dos o tres cosas que digan los fiscales, es igual, para mí las palabras se las llevan el viento. Yo quiero hechos y quiero respuestas. Quiero que se sepa la verdad. Mi mujer mínimamente se merece eso”, reclamó.

¿Cómo ves que ahora haya dos fiscales en la causa?

Lo que veo es que puede ser que ahora se dividan las tareas y se pueda avanzar un poco más. Pero el tema es que tengan la gente necesaria para poder avanzar en la investigación. Cuando se sacó el identiquit llegaron varias llamadas anónimas, pero el tema es que si no tenés la gente necesaria para ir y hablar con cada una de las personas para ver qué te dicen, es lo mismo que nada. Entonces, está bueno que haya un fiscal más, pero necesitamos más gente de campo que esté abocada a la investigación.

El fiscal salió a decir que a las cámaras de las inmediaciones ya las han visto. Pero todas las cámaras de la ciudad, en ese horario, deberían estar ya revisadas para identificar los autos, para ver dónde iban, para ver si coinciden con alguno que la gente que pasó por mi domicilio dijo que había visto. Que hace seis meses estén las cámaras congeladas de ese día y que no se hayan revisado, es porque no se ha avanzado. Se necesita gente para poder hacer eso y no se trata de poner cualquier persona a ver cámaras. Creemos que no hay la gente necesaria y que sea experta en algunas materias.

Y sobre que el celular de Jimena ahora se enviará a Buenos Aires para investigarlo…

El celular lo encontraron a los días. Yo creo que, para tener un diagnóstico del teléfono (más allá de que haya que hacer algunas pericias), una semana, dos semanas o un mes para revisarlo es suficiente. Y si acá no tenés la gente capacitada para poder ver al aparato y la gente idónea está en Buenos Aires, hace cinco o cuatro meses se pudo haber mandado. No deberían haber esperado tanto tiempo. Ahora que digan que para septiembre va estar recién el resultado, es una locura de tiempo.


¿Cuánto creés que tu salida a escena tiene que ver con lo que hay un nuevo fiscal?  

Más allá de que nosotros, con el abogado, teníamos contacto con el fiscal, la información que teníamos era muy poca. Nosotros sí sabíamos que había dos muestras genéticas de dos personas diferentes. Lo sabíamos y lo que hicimos desde el primer momento era seguir al pie de la letra lo que pedía el fiscal de que no entorpezcamos la causa. Entonces, si nos quedamos callados fue por ese pedido, pero ya pasó demasiado tiempo. Por eso empezamos a hablar y por eso mismo creo que se asignó un fiscal más, se empezó a hablar más y algunas personas, como el Ministro de Seguridad, salieron a hablar. Igual creo que el Procurador General debería habernos llamado por lo menos para decir qué están haciendo. Pero nunca tuvimos un contacto de nada.

Nosotros propusimos un montón de medidas que se tomen o se investiguen distintos tipos de cosas. Algunas se hicieron y otras no, pero al no podernos constituir como querellantes no podemos exigirlas. No queremos ir en contra de la investigación, queremos colaborar queremos que se aclare y poner todos los medios necesarios.

Por ejemplo…

Por ejemplo, ahora salieron con esto de la recompensa que es el pedido que hizo el procurador al Gobernador. Nosotros lo propusimos hace tres meses de hacerlo de forma particular, aunque eso no corresponda porque eso lo hace el gobierno. Por pedido del fiscal no lo hicimos, porque ellos decían que iba a entorpecer la causa. Pero pasaron casi seis meses y no tenemos nada; y ahora están haciendo algo que pedimos que se haga hace tres meses.

¿Y qué te pasa cuando ves esto?

Creo que nosotros no estamos tan equivocados en las cosas que estamos pidiendo. O sea que, más allá que yo no sea investigador o no sea abogado, que para eso está Pedro Arancibia que es un profesional del tema junto a los dos peritos que pusimos de forma paralela, el hecho que ahora se hagan estas cosas da la impresión de que no estábamos tan equivocados en lo que propusimos.

Dijeron que había más presencia policíal en Vaqueros, ¿esto se nota?

Los días que estoy en mi casa veo la misma cantidad de Policía que veo siempre. Por ahí, algunos en bici, pero la cantidad de policías es la misma y no veo que se haya hecho algo para prevenir. No veo que en Vaqueros haya cámaras. En verano, en los dos puentes está lleno de gente y siempre, todos los fines de semana hay gente apuñalada, peleas y no hay cámaras. Que la pongan ahora, a mí no me van a devolver a mi mujer. Pero ¿por qué no se hace? No se ha hecho nada para mejorar la seguridad.

Estás con más entereza...

Todo va por dentro, hay momentos que estoy bien, hay momentos que estoy mejor, hay momentos que estoy mal. Pero todo va por dentro. La verdad que tengo dos grandes motivos para seguir adelante; entonces yo no puedo quebrar, no puedo dejar que esto me afecte, más allá que tengo el corazón partido y que va ser un dolor que lo voy a tener toda mi vida, porque tenía planeado un futuro, un proyecto de vida con mi mujer, con mis hijas y ahora cambiaron todas las cosas. Las prioridades son mis hijas, tengo que estar bien para ellas. El hecho que salga a hablar ahora, es porque no veo nada que haya cambiado desde hace cinco meses.  Estamos en la misma. Y que salgan a hablar los fiscales, están dando información a la gente sobre cosas que nosotros ya sabemos hace tres meses. No hay un avance.


¿Sobre la hipótesis del robo frustrado qué pensás, hay otras hipótesis?

Es la hipótesis más fuerte. Pero hay cosas que no coinciden, como el hecho que no se hayan llevado nada más que el teléfono de Jimena. En mi casa había televisores, computadoras, no había plata, porque no éramos una familia  que manejábamos mucho dinero en efectivo. Vivíamos bien, pero nada más, no andábamos derrochando ni nada, yo soy un empleado de comercio.  No me cierra lo del robo frustrado. Pero no soy un experto.

Cómo era Jimena al respecto

Jimena no era nada confiada. Cuando venía la gente a cobrarnos el servicio de internet, Jimena por la rendija de la puerta le daba la plata y recibía el recibo.

Sí me cierra la teoría del modus operandis para entrar, el tema del perrito. Porque Jimena le gustaba mucho los animales. Y según lo que me dice la vecina, fue Jimena con el perrito a preguntar si era de ellos un caniche toy. Los vecinos, que tienen uno, le dijeron que no y ella se volvió y le dijo “bueno me voy porque el hombre me está esperando en la puerta de mi casa”. Esa pudo haber sido la forma de que ella abra la puerta de casa.

Cuando yo llegué a la casa, la llave estaba colgada en el alambrado como la colgaba siempre ella, o como la cuelgo yo cada vez que voy a abrir la puerta para que entre alguien. Por eso no hubo ninguna violencia en la puerta ni nada.

Cómo fue ese día que llegaste tu casa

No lo podía creer. No entendía nada, y no veía a mis hijas. Eso me puso re mal y, por otra parte, ver a mi mujer así. Era una escena terrible. Entré corriendo a buscar a mis hijas y no las encontraba, hasta que sentí un ruido en el baño. Fui a verlas y estaban las nenas ahí, adentro del baño. No se puede creer. Y no se puede creer porque Jimena era una persona súper buena que no tenía maldad. Sí decía las cosas que les gustaba y cuáles no, esa era una gran virtud: decía las cosas que le pasaba, era de no callarse y decir las cosas que sentía. Una súper mamá, una súper mujer, una compañera excepcional, entonces no puedo entenderlo. Todos los días pienso y pienso por qué alguien podría hacer algo así, no tengo explicación. Jimena era una persona increíble.

Estoy seguro de que Jimena querría que siga hasta el final  y voy a seguir hasta el final. No hay opción. Si tengo que hablar con el que tenga que hablar voy a hablar. A mí por dos o tres cosas que digan los fiscales, para mí las palabras se las llevan el viento. Yo quiero hechos y quiero respuesta. Quiero que se sepa la verdad. Mi mujer mínimamente se merece eso. Y yo quiero estar tranquilo, quiero descansar tranquilo también. La cabeza da vueltas, te pregunta por qué, y no conseguir respuestas es el problema.

Qué le pedís a la Justicia o ahora a los dos fiscales

Yo sigo creyendo a la justicia, pero sí me gustaría que se avance mucho más rápido en la investigación. Que la gente que esté trabajando esté preparada, o sea que sea idónea en el tema. Que se ponga a disposición todo lo necesario, no solo la parte económica sino también la parte humana; que empiecen a hacer cosas más allá del caso de Jimena. Que se pongan a hacer cosas por la seguridad de todos los salteños, porque la realidad es que la cantidad de muertes que hubo este año por asesinatos deja muy claro que no se están haciendo cosas que realmente se necesitan. Y que se aceleren las cosas en busca de la verdad, porque eso es lo que queremos. Queremos saber la verdad. 


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