Finalmente ayer se realizaron múltiples allanamientos en cuatro provincias del NOA en búsqueda de pruebas que ayuden a la Justicia salteña a desentramar la complejidad que adquirió la investigación del intento de homicidio de Adrián Ricardo Gerónimo.
A pesar del despliegue coordinado de fuerzas policiales, el hermetismo continúa en la fiscalía de Daniela Murúa que actúa con reservas de actuaciones decretadas por el juzgado de Garantías interviniente por un plazo de 10 días.
Hasta el cierre de esta edición, en Orán se hablaba de cinco detenidos y del secuestro de celulares y armas de guerra en algunos de los ocho allanamientos que se realizaron desde las primeras horas del viernes.
Con el correr de los días, la Justicia de Salta sigue investigando la causa en la que se menciona a sicarios tucumanos participando en la guerra narco en el norte provincial. Por este hecho, se confirmó que un hombre nacido en tierras vecinas está detenido en Orán.
En base a una serie de escuchas telefónicas, los investigadores creen que el sospechoso pudo haber estado involucrado en el ataque que sufrió Gerónimo. Un hombre desconocido lo esperó en la puerta de su casa y le disparó al menos seis veces. Recibió cinco balazos, pero logró sobrevivir.
Lugar del ataque mortal a Martínez en Orán.
La presencia de sicarios tucumanos en Orán quedó al desnudo y tiene a los investigadores salteños a las corridas. Por las calles de la ciudad norteña caminan personas que por entre U$S15.000 y U$S 20.000 (o en su defecto tres o cuatro kilos de cocaína) son capaces de matar a un rival. Entre las pruebas, aparecen escuchas telefónicas a las que LA GACETA tuvo acceso por fuentes .
En una de las escuchas, integrantes de una banda que se dedica al tráfico de drogas en esa zona del país hablan sobre un supuesto trabajo que deberían realizar. Esa tarea, según confiaron fuentes judiciales, se trataría de un o unos homicidios por encargo.
En base a las pruebas que figuran en el expediente que maneja la fiscal Murúa, los investigadores a lo largo de estas semanas comenzaron a entender que el robo de droga (conocida en la jerga como mexicaneada) entre ambas bandas podría haber sido la razón de esta escalada de violencia en Orán. En estos momentos de la charla, también trascienden algunos detalles de los planes que buscan aplicar en esa localidad salteña.
Fuentes judiciales confirmaron que el ataque se habría producido por el supuesto robo de mercadería que -se estipula- sería un cargamento de cocaína. A continuación, parte de las conversaciones a las que LA GACETA tuvo acceso.