El debate se encendió luego de que se viralizaran capturas de un grupo de Whatsapp en el que madres de un colegio de Buenos Aires festejaran que se haya cambiado de aula a un niño de tiene Asperger. Una de las madres afirmó que el menor de edad tenía conductas agresivas con sus compañeros. Pero, ¿qué es este trastorno y cómo afecta al desarrollo de los niños?
El psicólogo tucumano Diego Tarkowski en diálogo con LA GACETA, explicó que este trastorno es un subtipo de autismo y que los síntomas responden a un desajuste en el desarrollo. "La diferencia entre el autismo en sí y el Asperger se nota en la intensidad con que se manifiestan estos síntomas, es en lo único que difiere", indicó.
Asperger: otra manera de pensar y relacionarse
El profesional detalló que entre los principales síntomas se encuentran problemas de comunicación, de interacción social y los patrones de comportamiento. Los niños con este trastorno evitan el contacto visual, se mantienen asilados y cuentan con patrones repetitivos o tienen la necesidad de que las cosas permanezcan de una misma forma.
Cómo pueden notarlo los padres
"El autismo comienza a manifestarse a partir de los 18 meses de vida. El Asperger demora un poco más. Hay niños que fueron diagnosticados con Asperger a los siete u ocho años, y otros de adultos. Los síntomas del Asperger comienzan a manifestarse con las presiones sociales", apuntó Tarkowski.
El director del instituto San Martín de Porres aclaró que no hay un estudio específico para determinar si una persona tiene o no autismo, sino que se lo detecta a través de sus comportamientos. "No es una enfermedad, porque no tiene cura. Es una condición que acompaña a la persona desde que nace hasta su último día. Se puede tratar con un trabajo psicoeducativo", remarcó.
Qué puede hacer la sociedad por una persona con Asperger
"Ellos necesitan un ambiente que les brinde seguridad y confianza. No es que viven en su mundo, viven en el mundo de todos pero les es difícil manejarlo. Es importante informarse y conocer y a partir de ahí comprender, ponerse en el lugar del otro", remarcó Tarkowski. "A nivel legislativo nuestro país está a la vanguardia. El cambio (que hace falta) es cultural, no legislativo", agregó.
Se calcula que más o menos hay entre 400.000 y 600.000 personas en el país con distintos tipos de Trastorno Específico del Aprendizaje. Los diagnósticos determinaron que va aumentando la cantidad con el paso de los años pero, a pesar de que hay algunas hipótesis, no está comprobado qué es lo que lo genera.