Los estudiantes de la Universidad Nacional de Salta rechazaron el “Régimen disciplinario de estudiantes” que fue impulsado por la Dirección de Sumarios de la Alta Casa de Estudios a cargo de la abogada Raquel De La Cuesta. El proyecto a su vez fue refrendado por Susana Fernández, Vice Decana de la Facultad de Humanidades, Daniel Hoyos Vice Decano de Exactas y Pablo Yonar y Enzo Geron porel estamento de estudiantes de la misma Facultad.

Ante la medida los estudiantes se organizaron en una asamblea para rechazar la medida propuesta que se presentó sobre tablas en la última sesión del Consejo Superior, órgano máximo de la UNSa y que reúne a docentes y estudiantes de toda la Universidad. “En la asamblea se pidió al Consejo Superior el rechazo de manera unánime del proyecto de disciplinamiento estudiantil” explicó Waldo López, presidente del Centro de estudiantes de Humanidades. Además agregó que los motivos están sujetos a “cuestiones relacionadas con términos policíacos y persecutorios y que esta norma viene a criminalizar la protesta y la militancia política estudiantil”

Por otro lado, esta mañana se reunió la Comisión de Interpretación y Reglamento para tratar el proyecto que fue rechazado la semana pasada. “Estuvimos discutiendo y manifestando las distintas posturas de por qué se debería dar de baja al despacho” dijo a LA GACETA Emiliano Frascaroli, consejero superior por la lista “Todxs junxts”.

Toda la discusión se generó luego de que en septiembre pasado se hiciera pública una denuncia de abuso sexual de tres estudiantes de la Facultad de Ciencias Exactas. En esa oportunidad el Daniel Hoyos, Vice Decano de la unidad académica dijo a LA GACETA que el hecho “es complejo para nosotros porque nunca tuvimos este tipo de denuncias. “Hicimos muchas consultas a abogados para saber qué era lo que teníamos que hacer” agregó el directivo.

Los puntos polémicos del reglamento

El régimen presentado por la Dirección de sumarios de la UNSa tiene 66 artículos en total y establece en su artículo 1° que: “es aplicable a los estudiantes de esta Universidad, excluidos los de Educación Media por estar sujetos a sus propios reglamentos”.

“El régimen tiene mucho similitudes con un régimen también que salió en 1966 durante la dictadura. No digo que haya sido el espíritu de hacerlo pero tiene conceptos que llama más la atención” dijo Frascaroli.

Entre los artículos que generan dudas o son ambiguos en su aplicación se encuentra el artículo 2 que: “por hechos, actos u omisiones que realicen en el ámbito universitario o fuera de éste, que perjudiquen moral y/o patrimonialmente a la Universidad, con motivo u ocasión del ejercicio de su calidad de estudiante”. “Ahí aparece otra pregunta sobre qué es la moral y qué no; qué daña a la universidad. Todo eso podría recaer en la persecución política a estudiantes” sentencio Frascaroli.

Otro de los artículos que genera dudas es el artículo 51 que explica las causas para imponer una sanción disciplinaria. Entre ellas se encuentra: acciones que interrumpan o malogren el desarrollo normal de la actividad educativa. “Entonces uno también se pregunta: si usar el celular en la clase o si una persona quiere pasar a difundir un evento o durante la época de elecciones, ¿eso estaría interrumpiendo la actividad académica?” expresó Frascaroli

Otro de los artículos polémicos son el 53 y 54 que establecen la suspensión de seis meses por “participar en desórdenes en el ámbito de la Universidad que provoquen daños al patrimonio físico” y la suspensión de un año cuando se provoquen “daños graves a bienes físicos de la Universidad.

Un proyecto superador

Si bien el proyecto salió con un despacho en contra esta mañana desde la Comisión de Interpretación y Reglamento, se adelantó que existe un proyecto superador por parte de la Comisión de la Mujer con un “protocolo contra la violencia de género”. “Es un puntapié inicial para lograr universalizar lo que se necesita: contención. Y no meramente acciones legales punitivas que recaiga sobre el claustro mayoritario y más débil” sentenció Frascaroli.

El protocolo está impulsado desde la Facultad de Humanidades y busca la creación de una comisión Ad Hoc integrada por representantes de la Comisión de la mujer, miembros de las Facultades, una psicóloga y una persona del Instituto de abogados con perspectiva de género.

Al respecto de los pasos que se siguieron para el tratamiento del caso de las estudiantes abusadas en Exactas, Carolina Vaca de la comisión de la mujer dijo en un medio radial que: “El tratamiento que se ha llevado acá dentro de la universidad ha sido muy equivoco, no sólo de parte del personal jurídico, sino también de los administrativos y los espacios que podríamos decir de bastante poder en las facultades”. Además agregó que “no es el único caso, hay varios más y no es sólo entre estudiantes”